Fredric Brandt, médico dermatólogo pionero en el uso del bótox en tratamientos estéticos, se suicidó a los 65 años en su casa de Florida.
El experto que tenía como clientas a estrellas como Madonna sufría desde hacía tiempo una depresión a causa de las burlas que recibía en diferentes programas de televisión.
La portavoz de la policía de Miami, Frederica Burden, informó que los agentes hallaron el cadáver de Brandt en su casa en el barrio de Coconut Grove.
Burden aseguró que Brandt fue encontrado ahorcado, según ha publicado The HuffingtonPost.
Burden dijo que Brandt al parecer se suicidó y no hay sospecha de que haya sido un crimen.
Sin embargo, se ha ordenado una autopsia del cuerpo cuyos resultados serán concluyentes.
Brandt tenía clínicas privadas en Coral Gables y Nueva York y entre sus pacientes estaba Madonna.
El dermátologo, con un programa de radio y varios libros publicados, también tenía su propia línea de productos 'Dr. Brandt Skin Care en 2001'.
Brandt, conocido como el 'barón del bótox', abrió su consultorio en Miami en 1982 y fue el primero en desarrollar sustancias inyectables, incluyendo bótox para tratamientos de la piel.
Su publicista, Jacquie Tractenberg, dijo que Brandt sufrió de depresión durante años.
Recientemente, dijo, estuvo molesto por una mala representación de su persona en la serie de Netflix Unbreakable Kimmy Schmidt, por parte del actor Martin Short.
Tractenberg, sin embargo, negó que estas burlas haya sido la razón del suicidio.
