Ciudad de México, México.- El pasado 5 de febrero, la influencer Marianne Gonzaga protagonizó un violento episodio en un departamento del sur de la Ciudad de México.
La joven de 17 años habría atacado a la modelo Valentina Gilabert con un arma blanca, asestándole al menos 14 puñaladas.
La agresión dejó a la víctima con lesiones severas, incluyendo daños en los pulmones y una mano prácticamente destrozada.
De acuerdo con diversas versiones, Marianne viajó desde Cancún hasta la capital mexicana con la intención de reunirse con su expareja.
Sin embargo, al llegar, descubrió que el padre de su hija mantenía una relación con Gilabert. Este hallazgo habría desatado un arranque de celos que culminó en el brutal ataque.
Comentarios que cobran relevancia
Desde que el caso salió a la luz, las redes sociales han especulado sobre la relación entre la agresora y la víctima. Algunas versiones sugieren que se conocían previamente, aunque la única evidencia concreta son unos mensajes que Gonzaga dejó en fotos publicadas por Gilabert días antes del ataque.

En estas imágenes, la víctima aparece disfrutando en la playa. Marianne comentó las publicaciones con emojis de ojos de corazón y aplausos, lo que ha despertado aún más incertidumbre sobre el trasfondo de la agresión.
Proceso legal
Tras ser detenida, Gonzaga fue puesta a disposición de un juez, quien determinó su prisión preventiva bajo la acusación de lesiones calificadas. Por su parte, Gilabert sigue hospitalizada en estado grave.
Al tratarse de una menor de edad, la presunta agresora no puede ser juzgada como un adulto. La Ley Nacional del Sistema Integral de Justicia Penal para Adolescentes establece que, en casos de delitos graves, los jóvenes entre 14 y 18 años solo pueden recibir un máximo de cinco años de internamiento en centros especializados.
Este tipo de sanción no equivale a una prisión en el sentido estricto, pues busca priorizar la rehabilitación y reinserción social del infractor.