Su corazón no soportó perder a su hija. A horas de la muerte de Carrie Fisher, la famosa princesa Leia de Star Wars, el mundo se conmociona con el deceso de su madre, la también actriz, Debbie Reynolds de 84 años.
El deceso de la alegre actriz que cantó y bailó con Gene Kelly en el clásico “Singin' in the Rain” de 1952, ha causado la reacción de las estrellas de Hollywood, quienes han expresado sus condolencias y emotivos mensajes a través de las redes sociales.
Uno de los primeros en escribir un mensaje fue el actor y comediante, Albert Brooks, que coincidió con Debbie en la película 'Mother'. 'Una leyenda y mi madre en las películas. No puedo creer que esto pasó un día después de Carrie. Mi corazón está con Billie', escribió.
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Debbie Reynolds, quien fue nominada al Óscar como la indomable heroína de 'The Unsinkable Molly Brown', también ha recibido el homenaje de sus fanáticos, que a minutos de conocer la noticia, se acercaron a su estrella en el Paseo de la Fama de Hollywod, para dejar ahí flores, mensajes y velas.
No solo los actores que trabajaron a su lado envían condolencias. La comediante Ellen DeGeneres, escribió lo siguiente en su cuenta de Twitter: 'No puedo creer lo que la familia de Carrie Fisher y Debbie Reynolds están pasando esta semana. Envío todo mi amor'.
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Ella no fue la única, la actriz Debra Messing, que también coincidió con Debbie Reynolds en 'Will & Grace' dijo que estaba “devastada. Debbie se fue con Carrie. Es un devastador golpe 1 y 2. Ella fue mi 'madre' durante años y la quería mucho. Una leyenda'.
Por su parte, la actriz Zoe Saldana publicó en sus redes sociales que: 'Hoy es oficialmente un día triste. Como madre, mi corazón se dirige a Debbie Reynolds y a su hija Carrie Fisher. RIP DB Y CF'.
Mientras la actriz Bette Midler, calificó a Reynolds de “maravillosa, con gran talento y devota de su oficio” y aseguró que su muerte tras la de su hija “es demasiado dura de asumir”.
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Y quizá uno de los mensajes más tiernos es el de la modelo Naomi Campbell, quien colgó una foto en su cuenta de Twitter, en la que aparece con Carrie Fisher y deseó que ella y su madre estén “paseando con los ángeles”.
La actriz, quien estaba en casa de su hijo Todd Fisher organizando el funeral de su hija, comenzó a sentirse mal y acto seguido fue llevada al hospital, donde finalmente murió a causa de un derrame cerebral.
Reynolds se convirtió muy joven en una superestrella. Tras dos papeles menores en Warner Bros, por los que ganaba menos de 70 dólaresa la semana y tres de reparto en MGM, el jefe del estudio Louis B. Mayer la eligió para 'Singin' in the Rain' ('Cantando bajo la lluvia'), a pesar de las objeciones de Kelly, quien era su compañero de reparto y codirector.
