Tegucigalpa, Honduras.- Cuando Guillermo Anderson falleció el 6 de agosto de 2016, la memoria de su paso por esta tierra quedó en el legado que le dejó a Honduras, y es por eso que recordamos que un día como hoy el cantautor hondureño nació, y de no ser por los designios de la vida, estaría cumpliendo 63 años.
El 26 de febrero de 1962 nació en La Ceiba un niño que después convertido en hombre sería uno de los cantautores hondureños más queridos y reconocidos.
Anderson fue un hombre que amó la música, pero más que la música, amó a Honduras, y ese sentir quedó reflejado en las letras de sus canciones.
“En mi país de guamil y sol ardiente/ Se ve la historia en los rostros de la gente/ Hermosa tierra, vuelo de gaviota herida/ Tenés la luz que va repartiendo vida/ Sos la semilla y sos la fuerza en el arado/ Tenés el alma en el bullicio del mercado”, parte de la letra de “En mi país”, un himno para Honduras y su gente.
A lo largo de su carrera, Anderson abordó temas de amor, ecología y conciencia social, convirtiéndose en un referente musical y cultural en Honduras y Centroamérica.
Canciones como la mencionada “En mi país”, “El encarguito” y “Pobre marinero” siguen siendo recordadas y cantadas.
Solo “El encarguito” refleja la nostalgia del hondureño que ha tenido que dejar su tierra, y parte de esa cultura de mandar a ese nuevo hogar el “encarguito” que hace recordar el calor de la tierra añorada.
”Ya que escribiste del norte y te hacen falta muchas cosas/ Hay te mando un encarguito cortesía de Doña Rosa/ Ojalá pase la aduana y los compartas con mis tíos/ Y que al probarlas se olviden por un ratito del frío”.
A casi nueve años de la muerte del artista, y en el aniversario de su nacimiento, solo podemos decir que Guillermo Anderson dio el paso a la inmortalidad gracias a su voz, letras y acordes que son patrimonio de Honduras, y parte de esta identidad cultural reconocible sin importar las fronteras que se hayan cruzado.
Guillermo Anderson ya no apagará las velitas de ningún pastel, pero quienes aún existimos en este plano terrenal, celebramos que hace 63 años nació una de las voces más importantes en la historia de Honduras.
