Las críticas parecen resbalarle a Rubilio Castillo, atacante de Motagua. Ya van nueve encuentros de Liga y el delantero apenas ha anotado dos goles.
Castillo fue adquirido por los azules después de la extraordinaria campaña que hizo con Vida, con el que anotó 12 goles. En la actualidad, esa cifra solo es un recuerdo.
“Estoy bien anímicamente, tengo claro lo que quiero, sabiendo que primero Dios todo esto se va a revertir”, dijo.
En las redes sociales
En Twitter, Rubilio se desahogó escribiendo que no quiere abrazos falsos luego que Motagua se recupere de su crisis. “No es por la afición sino por ciertas personas que están ahí, lo que pasa es que vives una situación negativa y hasta tu sombra te abandona. Cuando estás bien todo el mundo se quiere subir al barco, pero cuando estás mal todo el mundo se tira de él. Yo estoy muy claro de lo que quiero con el equipo, y quiero a este equipo también y sé que lo mejor está por venir”.
Castillo sostuvo que no llegó al equipo para hacer ningún mal y que nadie quiere fallar jugadas de gol. El ariete le reprochó a los periodistas, quienes a su juicio exageran los problemas del club.
Consultado si le estaba debiendo al Motagua por su poca producción de goles, Castillo contestó: “Yo no le debo nada a Motagua porque no vine a salvar a ningún equipo, porque igual los defensas pueden anotar”.
Además, dijo que tiene la confianza de la gente que lo trajo al club y no descarta que todo puede cambiar el domingo cuando enfrenten al Deportes Savio.
“En el momento que he entrado a la cancha lo he dado todo y no tengo quejas, solo tengo que trabajar más en la definición de las jugadas y nada más”, puntualizó.