Toda Buanos Aires retumbó con el gol de Ángel di María que puso a Argentina en cuartos de final del Mundial de Brasil 2014.
El único gol llegó en el tiempo extra y devolvió el alma al cuerpo a miles de argentinos que el martes sufrieron el partido Argentina-Suiza que los clasificó a cuartos de final del Mundial.
'Ese gol se demoró mucho, demasiado. A Argentina le faltaba el último toque, meterla en el arco, el gol. Fue un partido muy sufrido', dijo a la AFP Nahuel Cusumano, un porteño de 28 años que llevaba una enorme peluca blanca y celeste.
'Sufrí mucho, fue tremendo. Pero ganó, y ganó con el corazón, a último minuto', aseguró de su lado Marcelo Gómez, de 42, otro de los miles de argentinos que salía del estadio Arena Corinthians de Sao Paulo después del juego.
Tras el partido, una marea blanca y celeste avanzaba rumbo al metro para volver al centro de la ciudad. Hombres en su mayoría, no dejaban de cantar y celebrar la agónica conquista gracias al gol de Ángel di María en el tiempo suplementario tras un empate sin goles.
Incluso dedicaban algunas estrofas al 'rey' brasileño Pelé, en la eterna discusión de quién es mejor, él o Diego Maradona.
'A Messi lo vas a ver, la Copa nos va a traer, Maradona es más grande que Pelé', decía la estrofa de una canción de guerra que comienza diciendo 'Brasil, decime qué se siente, tener en casa a tu papá'.
Y dentro del estadio la barra argentina también se sentía fuerte, aunque los suizos -apoyados por numerosos brasileños- no se quedaban atrás. Había expectación en el aire y ansiedad de lado y lado por el gol que no llegaba.
Aún así, fue como un 'sueño' para algunos de los hinchas.
'Esto fue un sueño. Estoy feliz. A pesar de que sufrimos, de que llegamos justos para evitar los penales, ahora estoy feliz. Con mi hijo lloramos abrazados cuando terminó el juego', contó Rodolfo Iriarte, de 39 años, que asistió al partido junto a su hijo de diez años.
Invasión argentina en Sao Paulo
Los alrededores de la Arena Sao Paulo se pintaron completamente de albiceleste, ya que más de 40 mil seguidores argentinos se hicieron presentes para apoyar a su equipo en el camino a la ansiada Copa del Mundo. Sin embargo, no todos pudieron hacerlo en vivo.
La Selección de Argentina cuenta con un enorme ejército de aficionados que los ha acompañado durante el Mundial y contra Suiza no fue la excepción. Las calles de Sao Paulo fueron invadidas por argentinos, sobre todo el barrio de Itaquera, que es donde se encuentra el estadio.