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'Quiero ver la medalla en mi casa”, desea Reinaldo Tilguath

“El que no sienta nervios en una final se debe dedicar a otro deporte”. El Chino nunca ha anotado goles en las finales contra Marathón, ante el que ha sabido lo que es coronarse, pero también ha perdido una corona.

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15.05.2012

Desde aquella primera final frente a Motagua en el 99, ya han sido muchas las que ha recaído sobre sus hombros, pero, a pesar de toda esa experiencia, Reinaldo Tiguath, no puede evitar sentir el gusanito de los nervios previo al duelo contra los Verdes, que podría representar el rugido número 25 para el Viejo León.

A sus 32 años, en los que ha vivido numeras definiciones de campeonatos, quizás muchos podrían decir que es una final más para él, sin embargo, el Chino dijo “claro que sí, uno no puede ser piedra, uno siente nervios, porque el que no los sienta es que no vive la final. Yo creo que el que no sienta nervios en una final, se debe dedicar a otro deporte, porque no está viviendo el partido como lo que tiene que vivir”.

La vive día a día

Y es que, si bien es un jugador acostumbrado a levantar a copas, es inevitable que, en la antesala de esta final, no piense diariamente en cuál podría ser la historia que se escribirá en el coloso capitalino.

“La verdad que yo la vivo intensamente todos los días, pienso, sueño que puede mejorar para hacer bien las cosas el domingo”, dijo el Chino luego del partido de ida.

él, con tantos años en el fútbol, es una voz autorizada para advertir la importancia de coronarse campeón porque al final eso es lo que queda en la retina del aficionado.

“Aquí lo importante es la medalla, es el esfuerzo, el estar allí, el ser campeón, y que la gente mire que uno es campeón, porque lo importante es ver colgada esa medalla en la casa, que dice que somos campeones”, reflexionó Reinaldo al imaginarse la conquista de la copa.

Pero, para hacer realidad ese sueño, serán 90 minutos de fútbol, en el que más que dejar el sudor sobre el pasto se debe dejar el corazón, porque enfrente tendrán a un rival que vendrá por su novena.

“Es un equipo, que me imagino va a venir a proponer, tiene un entrenador que le gusta el buen futbol, y nosotros igual, intentaremos hacer nuestro juego”, dijo Tilguath para luego hablar de su mejor amigo en el Monstruo: Yobani ávila.


“No me gusta apostar, o sea, me gusta respetar mi trabajo y como profesional, no puedo decir apostemos algo, porque en la cancha yo no tengo amigos, porque somos rivales”.

Tilguath: Debemos demostrar que somos el respaldo de Tosello

La número cinco es tan caprichosa como la vida misma, y así como los enfrentó en aquella final de 2002, ahora ambos, desde diversas aristas, se constituyen en baluartes importantes para que el León alcance el bicampeonato.

Tosello y Tilguath compartieron muchos juegos dentro de un terreno, sin embargo, el presente dicta que el Chino representa una de las piezas importantes en el diagrama del Francotirador.

“Si nosotros somos de la partida, debemos ayudarle a él porque ser entrenador no es fácil y como jugadores tenemos que demostrarle que somos el respaldo de él”, expresó el Chino al referirse a su DT Danilo Tosello.

Durante muchos años fueron compañeros y hasta rivales, por lo que el Chino es una voz autorizada para comentar la forma en que el argentino vive los juegos en el banquillo.

Hablando de la forma en que el de Sunchales disfruta los partidos, Reinaldo confesó: “Yo creo que el nivel de emoción es distinto porque hoy no puede entrar a la cancha a jugar, simplemente puede decidir quiénes juegan y quiénes no, pero siento que los vive más intenso ahorita como entrenador”.

El Chino comentó que después de tanto tiempo siendo compañeros es normal que de vez en cuando se gasten una broma, aunque explicó que siempre se hace dentro del marco del respeto.

Y, ante la curiosidad de saber cómo es ahora la personalidad del sudamericano en el camerino, el volante Merengue comentó “todas las charlas han sido normales, nunca ha pasado de decirnos que intentemos jugar, que le demos alegría a nuestra familia, a la afición, en fin, intentar jugar fútbol”.