Tegucigalpa, Honduras.- Alberth Elis jamás olvidará el pasado 24 de febrero, sintió que volvió a nacer luego de la lesión que sufrió en su cabeza jugando para el Bordeaux en la Ligue 2 francesa.
Ese día, la Panterita chocó contra un futbolista del Guingamp y apenas al minuto 10 tuvo que salir del partido, en camilla y atendido por el personal médico con destino al hospital.
Fue puesto en coma inducido, despertó y casi un mes después abandonó el hospital para comenzar su proceso de recuperación. Desde entonces no ve acción en los campos de juego.
Se cumplirán ocho meses desde ese trágico momento que casi le quita la vida a sus 28 años. Hoy se encuentra como agente libre, entrena y poco a poco vuelve a hacer fútbol.
Alberth Elis dio su testimonio de vida en la congregación Fresca Unción donde fue impactante en sus declaraciones sobre ese momento que lo marcó y cambió para siempre.
“Cuando todo estaba regresando a mi mente, que era jugador, hondureño... Me puse frente al espejo y me dije ‘¿Que hubiese pasado si muero?’”, sostuvo.
Y agregó: “Me di cuenta qué era lo más importante y lo más importante es tener a Dios en nuestros corazones. Desde ese día nunca me voy a volver a soltar de Cristo, el único que nos puede dar la felicidad. El dinero y fama no te da la felicidad”.
El delantero hondureño jugó un partido amistoso con su club de la Liga Mayor, Panteras FC y anunció anteriormente que en enero volverá a jugar profesionalmente.
