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EQUILIBRIO ENTRE TRABAJO Y FAMILIA

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02.05.2016

Tegucigalpa, Honduras

La historia de las mujeres en el campo laboral ha evolucionado drásticamente a lo largo de los años, pasaron de ser amas de casa dedicadas a la crianza de los hijos, a ocupar importantes cargos dentro de las corporaciones.

Pero, como todo en la vida, los grandes cambios traen consigo enormes retos, quizá uno de los más importantes para las mujeres resulta mantener el equilibrio entre familia y trabajo.

Definitivamente las exigencias que la sociedad demanda sobre la mujer han aumentado con el tiempo, es por tal motivo que la psicóloga Sumara Benítez comentó sobre el tema que “la mujer que se desempeña en un ámbito laboral debe tener un balance entre el trabajo y familia, no solo por el bienestar de los que más ama, si no también para evitarse situaciones de estrés y enfermedades psicosomáticas”.

Consejos para lograr el equilibrio entre familia y trabajo

Lo primero es buscar la manera y los mecanismos para equilibrar los tiempos en cada área y aspecto de su vida, y así evitar efectos secundarios. Para ello debe:

- Organizarse: la organización es algo vital, de esto dependerá no solo la calidad de tiempo que usted invertirá en su familia, si no también su productividad laboral.

- Definir los horarios: sean estos de oficina, casa o sociales, y respetar los mismos. “Un ejemplo muy claro es llegar a la casa y continuar atendiendo llamadas de trabajo en un horario que debería ser exclusivo para su familia, esto es un error”, señaló la psicóloga.

- Priorizar: las mujeres que fungen como amas de casa, ejecutivas y amigas, deben tener claro cuál es su rol más importante; en la mayoría de los casos prima el bienestar de sus seres queridos.

- Trabajo en equipo: delegue funciones dentro del hogar, y así las tareas serán menos pesadas.

- Políticas de la empresa: esto con respecto al tema de la familia, debe informarse de los permisos y derechos que esta brinda antes de aceptar un puesto laboral.

- Adelantar trabajo: procure hacerlo dentro de su horario de oficina, y no en su casa.

- Delegar funciones: suele suceder que las mujeres que ocupan puestos de alto rango son posesivas y no comparten las responsabilidades con terceros, creyendo que solo ellas pueden hacerlo bien. No caiga en este error, delegue, si no lo hace la más afectada será su familia.

Por último, exponga en el trabajo y con anticipación situaciones en las que tiene que resolver algo importante o alguna cuestión personal.

Aplicando todos estos consejos hará su carga laboral más llevadera, y así logrará administrar mejor sus labores y su tiempo.

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