Agentes de la Policía Nacional llegaron a la zona después de enterarse de la masacre. Unos minutos antes, sus compañeros abandonaron el lugar al recibir una llamada.
El mismo día de la matanza, los elementos de la Policía Militar detuvieron a uno de los presuntos “banderas” del grupo criminal con un radiocomunicador.
Conectados a la tecnología, las bandas criminales están utilizando radiocomunicadores para tratar de evitar que las autoridades conozcan sus planes.