Con hermetismo fue manejada por las autoridades la información sobre un operativo ejecutado la mañana del martes y sobre un posible intento de fuga en el módulo de segregación administrativa o de máxima seguridad en la Penitenciaría Nacional Marco Aurelio Soto.
En horas de la mañana trascendió a través de fuentes extraoficiales sobre un fuerte operativo policial en el reclusorio, por lo que periodistas de los medios de comunicación escritos, televisivos y radiales que cubren la fuente policial se movilizaron al lugar.
Para poder llegar al segundo retén que está a unos 150 metros de las instalaciones penitenciarias, la mayor parte de reporteros tuvieron que dar la vuelta por la carretera vieja que conduce a la aldea de Támara, desviarse por unas granjas avícolas y permanecer varios minutos en espera de la autorización para ingresar.
Confirman operativo
En forma preliminar las autoridades negaron que hubiese un operativo, pero luego confirmaron que sí, que era en el módulo de máxima seguridad y que permitirían el ingreso hasta que todo finalizara.
En el sector circularon rumores sobre una revuelta protagonizada el fin de semana por miembros de una mara, quienes habrían ocasionado daños en las paredes de tres celdas y que esa era la razón del operativo.
También se supo que en el interior los policías hallaron armas de fuego y otros objetos de uso prohibido, por lo que la prensa insistió en conocer la versión oficial.
Además, se confirmó que las llamadas por teléfonos celulares son nítidas y que la existencia de aparatos móviles en el interior es numerosa, según lo revelado por fuentes ligadas al penal.
Después de permanecer varios minutos frente al reclusorio, un oficial de la Policía accedió a salir a dar una entrevista sobre la operación que realizaban, pero no dio a conocer resultados.
Una fuente oficial confirmó que el titular de la Dirección Nacional de Servicios Especiales Preventivos (DNSEP), comisionado, Adrián René Flores Marcelino, salió a una reunión al Cuartel General de Casamata y a las 12:00 del mediodía daría una conferencia de prensa.
Operativo de rutina
El inspector general de Centros Penales, comisionado Quintín Juárez, informó que se trataba de un operativo en las diferentes celdas que componen el módulo de segregación administrativa, así como se hacen en todos los centros penales del país.
En esta ocasión, dijo, estamos haciendo un operativo de rutina en el módulo de segregación.
Al consultarle sobre el posible intento de fuga y sobre daños en las celdas, contestó que no es cierto.
“Lógicamente, toda persona que está privada de su libertad lo único que piensa es en salir de cualquier centro penal”, expresó.
Agregó que para eso están ellos como autoridad para garantizar sus derechos humanos, tanto dentro de los centros penales como la atención médica y que no haya riñas o problemas mayores.
Reiteró que no se registraron disturbios en el módulo y que el operativo es parte de las acciones que tienen planificado realizar antes de Semana Santa para evitar fugas y otro tipo de problemas.
Aseguró que en las primeras horas no habían encontrado armas ni otros objetos prohibidos, “quiero que sepan que los operativos duran hasta cinco o seis horas porque hay que revisar módulo por módulo, hablar con los privados de libertad, y es una tarea bien difícil”.
Contrario a lo que sucedía meses atrás, ahora resulta difícil llegar hasta la DNSEP y hablar con las autoridades para conocer la situación en la que opera la Penitenciaría Nacional.