Juticalpa, Olancho.- El cuerpo de un hombre que hace dos días había sido enterrado fue profanado de su tumba y posteriormente carbonizado. El atroz hecho se registró en un cementerio del municipio de Jutiquile, Juticalpa, Olancho.
De acuerdo con la información, el cuerpo carbonizado pertenece a Josué Ángel Portillo, de 38 años de edad, quien fue asesinado la mañana del lunes cerca de una gasolinera en el bulevar Los Poetas.
Portillo viajaba a bordo de una camioneta cuando fue interceptado por sicarios que se transportaban en motocicleta y le dispararon en reiteradas ocasiones hasta quitarle la vida.
Lo insólito fue que la mañana de este miércoles, personas que ingresaron al cementerio de la aldea Jutiquile, observaron que una tumba había sido profanada y el cuerpo estaba quemado.
Al aproximarse, observaron que se trataba del hombre que había sido sepultado pocas horas antes por los familiares, y los arreglos florales estaban dispersos cerca de la fosa.
La pareja de Portillo, quien por seguridad no fue identificada, denunció que malhechores profanaron la tumba de su esposo para posteriormente quemar su cuerpo.
“A mi esposo le hicieron varios intentos de homicidio. Le pido a las autoridades que investiguen; había varias denuncias sobre intentos de matarlo y nada. Las autoridades de Olancho no hacen nada nunca”, expresó la mujer.
“Nos están amenazando con matar a mi hijo y pido ayuda, por favor. Seguimos recibiendo amenazas; incluso amenazaron a una vecina que siempre me ayudó. Agarraron a las personas que atentaron contra mi familiar y los dejaron libres”, denunció.
En las imágenes se observa que los facinerosos retiraron la tierra de la sepultura y posteriormente le prendieron fuego al cuerpo. En redes sociales circula la fotografía del cadáver carbonizado dentro de la fosa.
Las autoridades policiales no han brindado detalles sobre las investigaciones relacionadas al crimen de Portillo, pues no han reportado personas capturadas por el sangriento hecho.
Equipos de la Policía Nacional deben realizar las averiguaciones para identificar y capturar a los responsables de haber cometido el homicidio.
Además, quienes son los que abrieron la sepultura y prendieron fuego al cuerpo de Josué Ángel Portillo, de quien no se dio a conocer a que se dedicaba.