En Honduras apenas el 6.4 por ciento de la población penitenciaria o privada de libertad cuenta con estudios de educación media o es pasante de una carrera universitaria.
El porcentaje refleja que de alrededor de 12,200 reclusos en las diferentes cárceles del país, unos 700 privados de libertad han cursado estudios de educación secundaria, son pasantes o profesionales universitarios.
Ante esta realidad y como medida para facilitar el proceso de rehabilitación de los privados de libertad, el gobierno anunció, a través de la Secretaría de Educación, la implementación de un masivo programa de educación al interior de los centros penitenciarios del país.
Se trata de una iniciativa que se pretende implementar a través del programa Educatodos, que actualmente beneficia a unos 1,200 reclusos a nivel nacional.
El programa fue dado a conocer por el secretario de Educación, Marlon Escoto, en sesión de Consejo de Ministros, en donde abogó por el respaldo de las instituciones encargadas del sistema penitenciario para impulsar el proceso de enseñanza aprendizaje al interior de las cárceles.
“Es un programa que hemos llamado ‘la educación también me da libertad’ y está dirigido a los privados de libertad que no han culminado la educación básica de nueve grados, la educación media y estaría siendo coordinado por el Programa de Educación Educatodos y está dentro del Plan de Nación”, explicó Escoto.