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Aplican excremento de pájaros como terapia de belleza

Desde hace cinco años ofrece lo que llama Facial Geisha.

13.12.2013

El spa Shizuka New York, propiedad de Shizuka Bernstein, ofrece un tratamiento facial a base de excremento de ruiseñor importado de varios países asiáticos. El costo por cada sesión es de 180 dólares.

Unas 100 personas acuden mes con mes a que les pongan caca de pájaro en la cara para que su piel permanezca lisa y suavecita. El centro de cuidados para la piel, se localiza en la Quinta Avenida de Manhattan y es famoso por utilizar una enzima del excremento de las aves para exfoliar la piel.

Shizuka Bernstein, es nativa de Tokio y está casada con un norteamericano, y desde hace cinco años ofrece lo que ella misma llama Facial Geisha.

“Procuro traer secretos de belleza japoneses a los Estados Unidos”, dijo Bernstein, quien aprendió el tratamiento de su madre. Aunque el tratamiento es raro en Estados Unidos, en Japón es algo común que se utiliza desde el sigo XVII, por actores y geishas.

Algunos profesionales del cuidado de la piel y la belleza afirman que el excremento de pájaro es el secreto de que las ancianas japonesas conserven un rostro lozano y saludable hasta la muerte. El producto que expulsan los pájaros se mezcla con el arroz en un recipiente, luego es aplicado en la cara con un pincel como el que utilizan las geishas para maquillarse. ¿A qué huele?: “Como a arroz tostado”, dice Miyoshi.

Pasados cinco minutos, se aplica espuma limpiadora y se coloca una toalla caliente bañada en esencias de lavanda y geranio. Luego se coloca una mascarilla de colágeno de té verde. Pero, para dermatólogos como Michele Green, el tratamiento no es muy diferente a cualquier otro exfoliante, que incluso se puede adquirir en la farmacia.