Semana Santa y vacaciones

En los países de Latinoamérica, donde predomina la religión católica, se conmemora la muerte y la resurrección de Jesucristo. En nuestro país, Honduras, el gobierno otorga feriado toda la semana, mientras que la empresa privada, un par de días solamente. Pero el punto que queremos destacar en esta oportunidad, es el tiempo de descanso que tienen los empleados, hay que trabajar de treinta a cuarenta años para poder jubilarse, la semana tiene siete días, trabajamos cinco y descansamos solamente dos. Por otra parte, en este sistema actual mundial, los jubilados son una carga para el Estado, es decir, hemos sido la mano de obra barata de aquellos que se han dedicado a concentrar la riqueza. Es verdad, los trabajadores necesitan de su empleo, pero también necesitan vivir de manera digna, pero en el mundo la gran mayoría sobrevive. En China, por ejemplo, debido a los aranceles impuestos han empezado a decir que compren directamente en su país, sin intermediarios, ya que un bolso de marcas muy conocidas producirlo allá cuesta 1,400 dólares y en aquellos países como Italia, Francia o Estados Unidos, tiene un costo de $10,000. ¿Pero cuánto cuesta la mano de obra en China? Los grandes edificios de Dubái se construyen con mano de obra barata, con inmigrantes, y la línea entre los ricos y los pobres está muy marcada. ¿Qué tan rentable es para un ser humano trabajar muchos años de su vida para jubilarse a una edad donde ya no tiene mucha energía, y muchas veces tampoco buena salud? En los feriados de este país, los que pueden se van de vacaciones para Semana Santa, los que no, se quedan en su casa porque tienen poco poder adquisitivo; las convivencias de la religión han pasado a segundo a plano. La gente lo que quiere es diversión, a nadie le cae mal ir a disfrutar la vida. En resumen, vivimos en mundo en donde se trabaja mucho para obtener pocas horas de libertad y relajarnos, estamos cómodos viviendo así, nadie dice nada, este es el sistema, nadie se cuestiona nada, quizás pocos puedan hacer algo, mientras tanto nosotros escribimos de lo que a pocos les interesa.