Garífunas: luchas y personajes

Para empezar, daremos contexto sobre la lucha del pueblo garífuna por el derecho a la tierra. La historia se repite. Mientras en el mandato de Carías se concesionaban las tierras por muchos años y a un precio absurdo, en el caminar del tiempo los garífunas han sido despojados de sus tierras engañados con falsas promesas y desarrollo para sus comunidades. Y queremos destacar el papel del pintor garífuna Cruz Bermúdez. Por otro lado, no cabe duda que la principal etnia que nos representa a nivel internacional es la garífuna, es también la que con su gastronomía y cultura ha tenido más influencia y la que más se ha mezclado con las tradiciones de los hondureños o la que ha tenido mayor aceptación; pero tampoco se puede desconocer que con el pasar de los años han sido despojados de sus tierras, y en ese conflicto, surgen personajes que han llevado la bandera de la lucha por defender su derecho a las tierras, pero para tener influencia y voz, primero han que tenido que abrirse el camino y destacar, como es el caso del artista Bermúdez, quien mantiene una galería de arte en la ciudad de Tela desde hace 25 años, en una casa que tiene más de cien, hecha por la compañía bananera. Bermúdez, por medio de sus pinturas, y gracias a su gran trayectoria, logró que la UNESCO declarara patrimonio cultural de la humanidad el casabe. Así como también Mirian Miranda ha logrado condenas internacionales para Honduras por violaciones a derechos territoriales. Es importante mencionar que los garífunas, en su mayoría, han tenido una resistencia pacífica frente a su problemática, y aunque los desafíos en la actualidad no han desaparecido, como estos: solo el 20% de las tierras despojadas fueron recuperadas (ej.: caso parcial de Triunfo de la Cruz), persiste la criminalización de líderes: 45 defensores garífunas enfrentan procesos judiciales falsos (2020-2025). El racismo estructural se mantiene en instituciones claves (ej.: sistema judicial, leyes agrarias). En resumen, tanto Miranda como Bermúdez han sabido desde una trinchera intelectual visibilizar su cultura, pero también los problemas de la misma, en eventos donde todos quieren su música, pero pocos se preocupan por sus derechos.