Venezuela deportó el martes a tres sospechosos de tráfico de drogas que eran requeridos por Colombia, Canadá y Estados Unidos.
Entre los deportados figuran Luc Letourneau, un canadiense que era requerido en su país de origen por el delito de tráfico de drogas, y Oscar Martínez Hernández, un estadounidense que es solicitado por Puerto Rico por varios delitos incluido tráfico de cocaína y heroína.
Las autoridades también deportaron al colombiano Adalberto Bernal Arboleda, alias 'El Beto', quien es requerido por narcotráfico y concierto para delinquir.
Letourneau, de 53 años, fue detenido el 16 de mayo del año pasado en la isla caribeña de Margarita por la división antidrogras de la Guardia Nacional.
'Fue un duro golpe a las mafias y organizaciones criminales', dijo a la prensa el ministro de Relaciones Interiores, Tareck El Aissami, al referirse a la captura de Letourneau, e indicó que tras su detención las autoridades locales le suministraron al gobierno canadiense una serie de datos que permitieron el desmantelamiento de una red internacional que operaba en Canadá, España y Venezuela.
Martínez Hernández, de 44, fue detenido el 4 de enero en la ciudad occidental de Maracaibo y Bernal Arboleda fue apresado el 11 de enero en el estado centro costero de Carabobo, señaló el ministro desde una de las pistas del aeropuerto internacional Simón Bolívar donde fueron entregados los detenidos a las autoridades de sus respectivos países.
Venezuela es considerado uno de los más importantes centro del tránsito de drogas hacia Estados Unidos y Europa. Funcionarios estadounidenses han acusado al gobierno del presidente Hugo Chávez de ser negligente en la lucha contra el narcotráfico.
Chávez, quien es en feroz crítico de Washington, ha rechazado los cuestionamientos y ha asegurado que los decomisos de droga aumentaron en Venezuela luego que terminó en el 2005 la cooperación con la agencia antidrogas DEA alegando que sus agentes incurrieron en actividades de espionaje.
La administración del presidente Barack Obama clasificó el año pasado a Venezuela como un país que ha 'fracasado' en el combate al tráfico de drogas.