Ciudad del Vaticano, Roma.- Posada sobre el techo de la Capilla Sixtina del Vaticano, se encuentra una blanca gaviota desde el primer día que dio inicio el cónclave. Y aunque para algunos es una molestia, religiosos aseguran que tiene un significado espiritual.
Uno de los momentos que más ha llamado la atención ante la espera de la fumata blanca, es la aparición de una gaviota sobre la chimenea.
Se trata de una Larus argentatus. Su nombre científico proviene del latín. "Larus" parece referirse a una gaviota u otra ave marina de gran tamaño, y "argentatus" significa "decorado con plata"
Aunque pareciera que está a la espera por el humo que anuncia si se ha elegido o no a un nuevo papa, lo cierto es que la presencia de esta ave se popularizó nuevamente, pues durante el cónclave de 2013 en la elección del papa Francisco, otra gaviota de la misma especia se posó sobre la chimenea poco antes de que saliera el humo blanco que anunciaba.
En ese entonces, la imagen, captada en vivo por miles de cámaras, fue interpretada por muchos como una señal divina, un símbolo de paz o un augurio positivo.
Desde entonces, la figura de la gaviota blanca ha despertado distintas interpretaciones entre fieles y observadores. Para algunos, representa al Espíritu Santo, cuya guía es esencial en el proceso de elección del Papa.
Para otros, simplemente se trata de una coincidencia que, por la solemnidad del momento, cobra un significado más emocional que religioso.
Lo cierto es que su presencia es mucho más engorrosa para los vecinos de Roma, donde proliferan en sus vertederos y en sus calles, no siempre limpias y lejos del litoral, cuadriplicándose en pocos años hasta alcanzar los 40.000 ejemplares, según algunas estimaciones.
Tanto que se han convertido en un símbolo de este cónclave, protagonizando infinidad de 'memes' en redes sociales que las muestran vestidas de púrpura o hasta con paramentos pontificios.