El gobierno venezolano pidió el viernes que cesen los rumores sobre la salud del presidente Hugo Chávez y acusó a medios de comunicación internacionales de prestarse a una campaña contra la estabilidad del país.
“Cesen los ataques contra nuestro comandante (Chávez), cesen los rumores, basta de estar utilizando esta situación, que es delicada para todos, para tratar de crear desestabilización”, dijo el vicepresidente Nicolás Maduro en un acto transmitido por todas las radios y televisiones del país.
Maduro, nombrado por Chávez como su heredero político, acusó directamente al periódico español ABC y a la cadena colombiana Caracol -a los que tildó de “fascistas”- de estarse “prestando a una campaña contra la estabilidad de Venezuela mintiendo sobre Chávez”, sin “respetar al ser humano que está sometiéndose a los tratamientos”.
Los venezolanos no han visto en video ni oído a Chávez desde que partió hace más de dos meses y medio a La Habana para someterse a su cuarta operación contra el cáncer, lo cual ha desatado todo tipo de rumores en los medios de comunicación y las redes sociales.
Sin embargo, el gobierno asegura que Chávez sigue gobernando desde el hospital militar, al que ingresó tras su sorpresivo regreso a Caracas el pasado 18 de febrero.
Desde que se le detectó el cáncer a Chávez en junio de 2011, el gobierno venezolano, que ha difundido escasa información del alcance de la enfermedad, ha criticado a numerosos medios de comunicación por especular sobre el estado de salud del mandatario.
“¿Hasta dónde van a llegar?”, exclamó Maduro.