Roma, Italia.- Una carta “preventiva” de renuncia en caso de presentar un “impedimento de salud” que no lo permita ejercer sus labores al frente de la Iglesia católica fue firmada por el papa Francisco en el 2013.
Tras el empeoramiento de su salud, la pregunta sobre si Francisco debería seguir liderando la Iglesia ha cobrado relevancia.
Actualmente se encuentra hospitalizado en el Hospital Gemelli de Roma, que se ha convertido en un lugar de peregrinaje para numerosos fieles que llegan a orar por su recuperación.
A pesar de las preocupaciones, el Papa ha reiterado que no tiene intención de renunciar por ahora. Según los últimos informes médicos del Vaticano, Francisco ha comenzado a retomar sus actividades de manera gradual, mientras sigue bajo cuidado médico.
En una entrevista realizada en 2022, el Papa explicó que la firma de esa carta no debe interpretarse como un acto común o predecible, y destacó la renuncia de su predecesor, Benedicto XVI.
Francisco recordó que su papado fue asumido con el compromiso de un “ministerio ad vitam”, es decir, de por vida.
¿Qué piensan las voces dentro de la Iglesia?
Recientemente, varios cardenales de alto rango en la jerarquía católica se han pronunciado sobre la posibilidad de una renuncia.
El cardenal Jean-Marc Aveline, arzobispo de Marsella, expresó plena confianza en la lucidez del Papa, afirmando que si Francisco considera que lo mejor para la Iglesia es dimitir, lo hará.
Por su parte, el cardenal Gianfranco Ravasi comentó que la renuncia podría ocurrir si el Papa enfrenta dificultades para continuar con su labor. “Él será quien tome la última decisión”, agregó en una entrevista reciente con el diario Il Corriere della Sera.
Las interrogantes sobre la capacidad de Francisco para continuar en el cargo aumentaron el viernes, después de una semana de su hospitalización por neumonía, sin que se hayan revelado muchos detalles sobre su estado de salud o sobre su tiempo de recuperación.
Desde el décimo piso del hospital Gemelli, donde el Papa de 88 años ingresó el 14 de febrero, la información se ha filtrado lentamente.
La Santa Sede asegura que el Papa ha retomado algunas de sus responsabilidades. Según una fuente del Vaticano, Francisco se reúne con sus colaboradores cercanos, lee y firma documentos, y atiende a su personal por teléfono.
Aunque se ha confirmado que permanecerá hospitalizado al menos una semana más, los médicos informan que ha mostrado signos de mejoría, aunque todavía no está fuera de peligro y vaticinan que su estancia en el centro hospitalario se prolongará.