Líderes de la oposición siria minimizaron las próximas elecciones parlamentarias, a las cuales calificaron como un intento cínico del presidente Bashar Assad para mantenerse en el poder, por lo que exhortaron a los electores a mantenerse alejados.
El régimen ha descrito la votación del lunes para el Parlamento de 250 escaños como una señal de su disposición para realizar elecciones democráticas, mientras al mismo tiempo niega que enfrente un levantamiento popular.
La elección ocurre tres meses después de la adopción de una nueva Constitución que permite la formación de partidos políticos para competir con el partido gobernante Baath.
Pero los rivales de Assad opinan que, sin su participación, las reformas son una farsa y las elecciones no pueden realizarse a punta de pistola. Una tregua impuesta por la ONU a mediados de abril no ha podido detener la brutal represión del régimen en 14 meses que lleva la sublevación contra Assad.
'Pensamos que las elecciones no tienen nada de credibilidad en medio de una situación donde el régimen está matando a la población', dijo Bassma Kodmani, vocero del Consejo Nacional Sirio, el principal grupo de oposición en el exilio. 'Es un insulto al proceso democrático'.
El líder opositor Haytham Manna se opone a estas elecciones 'porque no tienen ninguna característica de las elecciones libres'. Manna encabeza el Organo Nacional de Coordinación para el Cambio Democrático en Siria, que representa a activistas en Siria y en el exilio. Manna habló desde Bruselas y Kodmani desde París.
En Siria, activistas también rechazaron el voto y han visto poca preparación del gobierno para las elecciones en algunas áreas donde predomina la oposición.
En el poblado sureño de Dael, los residentes impidieron que se colocaran carteles electorales y en su lugar colocaron fotos de 20 personas de la ciudad que murieron en la revuelta.
'Ellos son nuestros candidatos al Parlamento', dijo Adel, un activista local, en referencia a los muertos.
