Nueva York, Estados Unidos.- El comisionado de Inmigración de Nueva York, Manuel Castro, dijo que hay mucha incertidumbre entre los inmigrantes que están dejando los albergues en la ciudad -algunos han buscado ayuda en iglesias- debido a la política de deportaciones masivas de la Administración del presidente Donald Trump.
"Estamos entrando a otra fase en la llegada de los inmigrantes a Nueva York" con el cierre de hoteles y otras instalaciones que se han usado como albergue tras dos años de una ola migratoria que trajo a esta ciudad a más de 200.000 inmigrantes, comentó Castro a EFE que asistió junto a otros jefes de agencias y otros funcionarios a un evento encabezado por el alcalde Eric Adams.
Aun así, quedan aún 40.000 inmigrantes al cuidado de la ciudad.
El cierre de los albergues anunciado por Adams debe estar completado para junio, entre ellos del que fue uno de los hoteles más reconocidos en Nueva York, el Roosevelt, que tras la pandemia no reabrió sus puertas, pero luego la alcaldía lo convirtió en centro de operaciones para los recién llegados y en albergue para familias con niños.
Castro dijo que ese flujo de inmigrantes ya se detuvo, como resultado de que ha disminuido el cruce de indocumentados a través de la frontera con México, tras la llegada a la presidencia de Trump.