Tegucigalpa, Honduras.- ¿Y si mañana me toca volver? es una pregunta que retumba en la cabeza de más de 55 mil hondureños que están bajo el Estatus de Protección Temporal (TPS).
En medio de la ansiedad y la esperanza, los miles de hondureños en Estados Unidos viven días de incertidumbre, con el corazón en un puño y la mirada puesta en Washington.
La cuenta regresiva avanza y con ella crece la tensión por la inminente decisión que tomará el gobierno estadounidense sobre la extensión o cancelación del TPS para Honduras en este 2025, un beneficio migratorio que ha permitido por más de dos décadas que miles de familias se mantengan legalmente en ese país.
Este lunes, la administración de Donald Trump decidirá si amplía o revoca el TPS para los hondureños. Si se revoca, el beneficio expirará oficialmente el 5 de julio.
Juan Flores, presidente de la Fundación 15 de septiembre, quien lidera los esfuerzos de cabildeo en Washington para que el gobierno estadounidense extienda este estatus, no pierde la esperanza de la ampliación de este beneficio.
"Estamos haciendo un arduo trabajo, sería lamentable que se cancelara, pero en caso de no tener esa extensión, se procederá a temas jurídicos", advierte Flores.
El TPS ha sido un salvavidas para miles de migrantes que salieron de Honduras tras el paso del huracán Mitch en 1998. Desde entonces, muchos de ellos han formado familias, han pagado impuestos y se han integrado activamente a la economía estadounidense.
Su posible cancelación representaría una tragedia humana y un golpe para la estabilidad de decenas de comunidades en ambos países.
"Esperemos que la administración del presidente Donald Trump pueda tener esas observaciones, que todavía Honduras no tiene las condiciones para que estas familias de tepesianas pudieran retornar", recalcó Flores.
Momento clave para la diplomacia de Honduras
Itsmania Platero, defensora de derechos humanos y experta en migración, sostiene que el momento es clave para la diplomacia hondureña.
"Lo más importante ahora es socializar la nota que ha enviado el Estado de Honduras y que esta llegue a oídos del nuevo asesor del presidente Trump, Marco Rubio", dijo Platero.
Consideró que Rubio un personaje clave para la decisión, dado su papel como asesor de seguridad y en temas internacionales.
Las declaraciones de Platero apuntan a un elemento que podría ser decisivo con la postura política de Honduras frente a Estados Unidos.
“En el pasado, el presidente Trump no tuvo reparo en cancelar el TPS para otros países, incluso cuando los beneficiarios cumplían con todas las exigencias migratorias”, recordó.
Para Platero, no solo se trata de humanidad o justicia. También es un asunto económico.
“El tepesiano forma parte del Producto Interno Bruto de Estados Unidos. Dan empleo a otros latinos, envían remesas, son una fuerza activa”, detalló.
De hecho, las remesas representan más del 25 % del PIB hondureño, y cualquier golpe al TPS podría tener consecuencias directas en la economía nacional.
Analistas no creen que EE UU amplíen el TPS
El experto migratorio Graco Pérez pinta un panorama más pesimista, debido a los hechos que se desarrollaron con la anterior embajadora de los Estados Unidos en Honduras.
"Si pusiera la situación en una balanza, hay más probabilidades de que no se extienda", afirma tajantemente.
A su juicio, las relaciones entre Honduras y Estados Unidos no son lo suficientemente sólidas, especialmente bajo la administración actual, como para garantizar una renovación automática del beneficio.
Pérez señala que países como El Salvador, que han mantenido una relación más estrecha con Washington, han visto renovaciones más consistentes del TPS.
“La visita de Marco Rubio y de la secretaria de Seguridad Nacional a El Salvador refuerza esa conexión. En cambio, con Honduras no ha habido ese mismo acercamiento", lamentó Pérez.
El viraje diplomático hacia países como China y el reconocimiento del gobierno de Nicolás Maduro en Venezuela, sostiene Pérez, también pesan en el análisis político de Estados Unidos.
“Hay una visión clara, los países que se alinean con la política exterior estadounidense tienen mayores beneficios. Honduras, en este momento, no clasifica en esa categoría”, aseguró.
Más allá de los análisis geopolíticos, el drama humano es innegable. Muchos de los tepesianos tienen décadas de residir en EE UU.
Sus hijos han nacido allá, han comprado casas, tienen negocios y raíces profundas en una tierra que, para ellos, ya es su hogar.
“El gobierno debe prepararse para un escenario negativo. ¿Cómo va a atender a decenas de miles de personas si tienen que regresar?”, cuestiona Pérez.
Sugiere que el país debe tener un plan de regularización, de apoyo legal y psicológico para quienes puedan enfrentar la deportación o se queden en un limbo migratorio.
A pesar del panorama sombrío, no todo está perdido. Las organizaciones de hondureños en los Estados Unidos continúan presionando y haciendo lobby.
"Creo que ellos tienen más peso que la misma Cancillería", dice Pérez con sinceridad. “El trabajo comunitario y de base, en este momento, puede inclinar la balanza.”
Mientras tanto, la incertidumbre mantiene en vilo a miles de familias. Algunos ya preparan planes de contingencia. Otros, simplemente rezan.
La decisión, según se espera, podría conocerse entre el 5 y el 6 de mayo. Y para entonces, la vida de más de 50 mil hondureños podría cambiar para siempre.
El gobierno espera respuesta de Washington
Por su parte, las autoridades de Cancillería expresaron que han hecho todo lo que está en sus manos para impulsar la ampliación del TPS.
"Somos prudentes, depende de la administración Trump esta decisión, la relación está al más alto nivel. Hicimos las gestiones necesarias, yo me reuní con la secretaria de Seguridad Nacional de los Estados Unidos, le expusimos la importancia que tiene el TPS, no solo para los hondureños, sino también para la economía americana", expresó Eduardo Enrique Reina, canciller hondureño.
A criterio del canciller debido a la buena relación que se ha gestado en los últimos años, se espera una respuesta positiva para el beneficio de los miles de hondureños que están bajo el TPS.