Honduras

Relieves con toques de elegancia

El repujado en láminas de aluminio es una actividad artesanal, meticulosa y detallista que le da vida a variedad de dibujos a través de las manos creativas del negocio Arte Kalema.

FOTOGALERÍA
07.04.2014

El delicado marcado de los contornos de una figura sobre una lámina de aluminio da forma a bellos y originales relieves de dibujos en plateado que destacan elegancia sobre una retratera, portallaves, separador de libros y mucho más por medio del arte del repujado.

Esta técnica que comenzó a desarrollar como un simple pasatiempo Karla Maradiaga, con el paso del tiempo se fue convirtiendo en un negocio, lo que se conoce hoy con el nombre de Arte Kalema.

“En el año 2008, una amiga me enseñó en mis tiempos libres el arte en repujado, el cual consiste en hacer trazos y presión sobre una lámina de aluminio para proporcionar relieves a un dibujo en específico”, manifestó Karla Maradiaga, gerente general de Arte Kalema, quien también comentó que en un comienzo se le dificultó mucho aprender de esta técnica, ya que se requiere delicadeza al momento de manipular el aluminio; si no se tiene el debido cuidado, el aluminio se rompe.

“Aquí tenemos negocio”

Karla realizaba productos de arte en repujado solamente para regalar a familiares y amistades, pero en una de esas ocasiones un amigo de ella, al ver todas sus manualidades, inmediatamente expresó: “Aquí tenemos negocio”. Él le ayudó a promover algunos de sus productos en un establecimiento de

Valle de Ángeles, en el cual, para sorpresa de Karla, dichas manualidades se vendían en cuestión de pocas horas.

Eso motivó a Karla Maradiaga a emprender su propio negocio en el año 2011, bajo el nombre de Arte Kalema.

Kalema

“El origen del nombre de mi microempresa fue muy curioso, este surgió cuando estudiaba en el colegio, en el que el entrenador del equipo de baloncesto al cual yo pertenecía necesitaba diferenciar a cada Karla Maradiaga que formaba parte del grupo, fue muy curioso que varias integrantes también tuvieran el mismo nombre y apellido- Entre tanto pensar
y pensar, al entrenador se le ocurrió que a mí me llamaran Kalema, el cual proviene de las iniciales de mi nombre: Karla Leonora Maradiaga; nombre original que quedó perfecto para el negocio”, adjuntó.

Al establecer Karla formalmente su Micro, Pequeña y Mediana Empresa (Mipyme) se afilió al programa de Mujeres Emprendedoras de la Cámara de Comercio e Industria de Tegucigalpa (CCIT), donde aprendió bastante sobre el mundo de los negocios.

Creaciones

Entre los productos que son elaborados en Arte Kalema se destacan: cuadros o pinturas, magnetos para decorar la refrigeradora, separadores de libros, cofres, retrateras, portallaveros, bolsas de regalo y tarjetas, entre otras manualidades en que la imaginación se pone a prueba en cada creación, sobre todo cuando el cliente solicita productos personalizados.

“Gracias a los artículos personalizados es que he logrado expandir mis productos, yo no me limito en absolutamente nada, ya que mi objetivo es satisfacer al cliente”, adjuntó Maradiaga, quien también explicó que uno de los mayores retos que le ha tocado realizar
fue el tallado maya, debido a la gran variedad de relieves que contienen estas figuras.

Clientes

La gerente general de esta microempresa manifestó que no le costó obtener clientela, ya que gracias a la participación en ferias microempresariales, el apoyo de la CCIT y su página en Facebook ha logrado varios pedidos en manualidades; tal es el caso de un reconocido hotel que solicitó la elaboración de llaveros, portallaveros y cuadros decorativos para las habitaciones, así como la rotulación de cada una de las puertas. “Junto con mi familia tuvimos un trabajo muy arduo, pero que valió la pena”, expresó la experta en arte en repujado.
Cursos

A partir del año pasado Arte Kalema implementó los cursos en repujado en aluminio, con el objetivo de enseñar esta interesante técnica para que así los jóvenes puedan entretenerse en algo sano que les pueda servir para poner su propia microempresa.

Desde la edad de 15 años pueden ser parte de estas capacitaciones que constan de tres niveles (básico, intermedio y avanzado), cada curso tiene una duración de 16 horas. Las clases pueden están conformadas por un grupo mínimo de cinco personas y un máximo de 12 integrantes.

Entre los planes a futuro de Arte Kalema está seguir expandiendo sus creaciones en repujado en aluminio por cada rincón del país, y continuar transmitiendo sus conocimientos en esta técnicas a través de sus cursos, pues llama mucho la atención que los clientes no solo desean comprar una pieza, sino aprender a hacerlo con sus propias manos.