Erandique, Honduras.- El padre Sandro Aguilar, párroco de la iglesia Santa Bárbara en el municipio de Erandique, reaccionó con contundencia ante el anuncio del asesor presidencial, Manuel Zelaya Rosales, de hacer obligatoria la lectura -en escuelas y colegios- del libro "Golpe 28-J".
Durante su homilía, el sacerdote calificó la propuesta como “una tontera” y expresó su preocupación por el rumbo que toma el país cuando decisiones de ese tipo se promueven desde el poder. “Escuchando que este viejo loco, y el del Estado, quizá ha escrito un libro del golpe de Estado... y hoy lo quieren obligar que en las escuelas tiene que leerse, por favor. Ese está loco, es un enfermo mental, y como sale en La Gaceta tiene que leerlo el maestro, eso no ayuda en nada, eso no saca adelante al país”, dijo Aguilar desde el altar.
El religioso, que dirige la parroquia Santa Bárbara en Erandique, durante una transmisión de la santa misa en vivo, consideró que la medida, al estar publicada en el diario oficial La Gaceta, podría traer represalias contra docentes que se nieguen a aplicarla.
“A saber qué represalia le harán a la escuela o al maestro que no lo lea. Como lo amenazan, ‘le quitamos el trabajo’. Los maestros están sometidos bajo ese yugo”, cuestionó.
Aguilar también advirtió sobre el riesgo de que los políticos interfieran en ámbitos esenciales como la educación, la salud e incluso la fe. “Yo siempre lo he dicho y lo voy a sostener: cuando el político se mete en educación, destruye todo; cuando se mete en salud, hace pedazos todo; y si permitimos que se meta en la iglesia, se destruye la iglesia”, afirmó.
El sacerdote cerró su mensaje haciendo un llamado a sus feligreses a la reflexión ciudadana ante lo que considera abusos del poder. “Cuando una persona está enferma del poder, llega a creerse Dios...”, expresó con firmeza, sumándose a la ola de rechazo contra la medida que busca imponer el texto en cuestión como obligatorio.