La mañana inició más temprano que otros días. Las aguas del mar que mantienen como vecino les obligaron a salir de sus casas sin previo aviso.
Y es que cerca de las 1:00 de la mañana las casetas que se encuentran a la orilla de la playa, en las comunidades donde se registró el mayor daño fueron Cedeño y Los Delgaditos, comenzaron a inundarse.
Las elevadas crestas de agua que se formaban desde lo profundo del mar, en segundos llegaron hasta las casas más cercanas de la costa.
A causa de esta situación, los vecinos abandonaron las viviendas junto con algunas de las pertenencias antes de que fueran succionados por las saladas aguas.
El caudal de las aguas inundó hasta las calles, por lo que los pobladores decidieron navegar con las canoas por entre los caminos para poner a salvo desde ropa hasta electrodomésticos.
Otros, en medio de la emergencia, sacaron sus enseres con ayuda de vehículos pick-up, pues además de salvar sus vidas, querían también rescatar los artículos del hogar.
También hubo personas que desafiaron las aguas al ir y venir en las zonas inundadas con tal de recuperar algunas pertenencias sobre sus hombros.
Las labores de evacuación por parte de los pobladores se extendieron por más de seis horas.
Las olas, según los vecinos, alcanzaron hasta los 20 pies de altura
Las champas que se habían construido para la Semana Santa en su mayoría fueron tragadas por el mar.
Benjamín Velázquez, propietario del local Rancho El Edén, dijo que el agua subió como nunca.
La subida de las olas se pudo observar desde las 10:00 de la noche del viernes, pero la alerta de evacuación se dio a la 1:00 de la madrugada, informó Velásquez.
La mayoría de los pobladores coinciden que este año el nivel de las olas fue mayor en relación a otras marejadas.
En la playa El Edén ocurrió lo mismo, según el entrevistado, pues en su negocio se perdieron hasta los aparatos eléctricos.
“Es lamentable perder nuestro negocio, que construimos con los años, en apenas una noche”, expresó el afectado.
En la comunidad de El Edén el mar se llevó unas 15 champas, contruidas con techo de palma y ramas.
En la comunidad de Cedeño Centro el agua se metió hasta llegar a las calles pavimentadas.
Los barrios cercanos a la playa se convirtieron en un espacio mas para el movimiento de las aguas marinas.
De acuerdo con Fabián Ordóñez, presidente del patronato de Cedeño, la mayoría de los vecinos reportan daños, ya que el agua se apoderó de las viviendas.
“Lo más peligroso es que el mar nos ha aislado, ya que el estero que está detrás de nuestras viviendas al igual ha comenzado a inundarse”, dijo Ordóñez.
Otro de los problemas que expusieron los afectados es que la mayoría vive de la pesca y debido al fuerte oleaje será imposible salir a pescar en los próximos días.
Son alrededor de 900 familias las que habitan en la comunidad de Cedeño, con un estimado de unas 4,500 personas.
Las marejadas afectaron las comunidades de Cedeño Centro, Cedeño, El Edén, Los Delgaditos y Punta Ratón, según los cuerpos de socorro.
El jefe de operaciones de la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco), Jorge Alberto Solís, dijo que se inicio el levantamiento de un censo para conocer los daños, así como afectados por cada comunidad.
“Se ha puesto una prohibición para que los turistas eviten llegar hasta la orilla de la playa, con la finalidad de salvaguardar sus vidas”, dijo el funcionario.
Advierten nuevas marejadas
Por su parte, la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco), informó que las mareas altas continuarán experimentándose en el sur de Honduras hasta el próximo lunes.
'Para mañana domingo a la una de la madrugada y a la 1:42 de la tarde, se espera que las olas alcancen los seis pies en alta mar y los nueve pies en la costa', indicó el organismo de prevención.
Para el lunes, se espera que el oleaje tenga similar comportamiento a las 2:00 AM y 2:34 PM.
Ante las afectaciones experimentadas la madrugada de hoy en los municipios de Cedeño y Los Delgaditos, equipo técnico de Copeco se trasladó a los municipios de Marcovia, Cedeño y Los Delgaditos, en el departamento de Choluteca, para realizar la evaluación de daños y análisis de necesidades.
