La seguridad de miles de ciudadanos que salieron a las calles a conmemorar la independencia patria pasó por la efectiva participación de la Policía Nacional de Honduras.
Contrario a los disturbios de años anteriores, en esta ocasión solo se reportaron algunos escándalos leves al interior del estadio nacional.
Y es que según el comisionado Harold Bonilla Andara, jefe de la Policía Metropolitana, para los eventos del 15 de septiembre se desplazaron al menos 1,300 efectivos a las calles.
De esta cantidad, 300 agentes le pertenecen a la Dirección Nacional de Tránsito (DNT), mismos que se encargaron del efectivo desplazamiento del tráfico vehicular.
El jefe policial expresó que los uniformados velaron por la integridad de los capitalinos, así como por los bienes públicos y privados.
Tal es así que en la marcha de protesta paralela protagonizada, por los gremios magisteriales y el Frente Nacional de Resistencia, los oficiales se presentaron en mayor cantidad.
“Nos hemos desplazado en mayor número a la marcha de protesta, por algunos antecedentes que hay en este tipo de actos”, sostuvo.
Indicó que se procedió a dialogar con los líderes del movimiento político para evitar percances.
En ese sentido, Andara Bonilla explicó que los agentes tenían instrucciones claras de garantizar la protección de los participantes.
No obstante, dejó clara la posición de que no se iba a permitir ningún tipo de escándalo que pusiera en riesgo la integridad de las personas y los bienes particulares.
A la lucha por brindar seguridad se unieron el Cuerpo de Bombero, Copeco, Cruz Roja y Scouts.
