Tegucigalpa, Honduras.- A tres años y medio de iniciado el gobierno de Xiomara Castro, la instalación de la Comisión Internacional contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (CICIH) continúa siendo una promesa sin cumplir.
Lo que en campaña fue presentado como un compromiso inquebrantable, hoy se percibe como una bandera desgastada, manipulada políticamente y usada para ganar tiempo ante la presión.
La firma de una quinta prórroga al memorando de entendimiento con la ONU ha sido vista por muchos como una burla más al pueblo hondureño.
Desde que se anunció la intención de crear una comisión con el respaldo de Naciones Unidas, los obstáculos han sido constantes y, en muchos casos, provocados desde el propio aparato estatal.
Reformas no han sido aprobadas, las condiciones mínimas que exige la ONU siguen sin cumplirse, y la supuesta voluntad política se ha limitado a discursos sin acciones.
El gobierno ha logrado extender el proceso durante tres años sin mostrar resultados reales, generando la percepción de que nunca hubo una intención seria de instalar la CICIH.
Diversos sectores coinciden en que el proyecto está prácticamente "muerto" y que ya no hay condiciones para que se concrete durante esta administración.
No se instalará...
Para el experto en relaciones internacionales Graco Pérez, la instalación de la Comisión Internacional contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (CICIH) es una promesa fallida que ha sido utilizada políticamente sin voluntad real de cumplirla.
En una entrevista brindada a EL HERALDO, el analista fue categórico al señalar que, en lo que resta del actual gobierno de Xiomara Castro, es “imposible” que la misión anticorrupción se concrete, y advirtió que incluso si el Partido Libertad y Refundación (Libre) continúa en el poder tras las elecciones de noviembre, el panorama no cambiaría.
Pérez cuestionó duramente que el Ejecutivo haya trasladado ahora la responsabilidad al Congreso Nacional, argumentando que desde Casa de Gobierno no se ha demostrado interés genuino.
“Ya demostraron que no tienen voluntad. Si tuvieran, la CICIH ya estaría aquí. Llevamos cinco prórrogas del memorando y nada cambia”, expresó.
A su juicio, la CICIH se ha convertido en una herramienta electoral más que en una estrategia real de lucha contra la corrupción.
“Antes en campaña se hablaba de empleo, salud, educación. Ahora se sumó el tema de la CICIH como una promesa vacía. El que gane dice que la va a traer, pero en realidad nadie ha cumplido. Libre prometió instalarla y no lo hizo, y los otros partidos ahora la usan como bandera para volver al poder”, apuntó.
Subrayó que no se puede hablar de independencia de poderes en el país, ya que el Congreso, la Corte Suprema y el Ejecutivo actúan como una misma estructura de poder.
“Igual que antes con el Partido Nacional o el Liberal. Ahora el partido Libre tiene el control de todo y aún así no ha hecho nada. El Congreso responde al Ejecutivo, y si no ponen el tema en agenda es porque no quieren”, aseguró.
Sobre los próximos seis meses, Pérez se mostró escéptico, “vienen las campañas, el receso legislativo, las excusas de siempre. Si no hicieron las reformas en tres años y medio, ¿lo van a hacer en julio o agosto?”, cuestionó.
Para el experto, lo único que ha demostrado voluntad es la ONU, al seguir renovando el memorando a pesar de las trabas internas. “La ONU los ha dejado en evidencia, mostrando que sí hay interés, pero que desde Honduras no se avanza”, puntualizó.
Sostuvo que incluso en caso de instalarse la CICIH al final del actual gobierno, su efectividad estaría comprometida.
“Ya hay posibles actos de corrupción que podrían ser señalados, y nadie en el gobierno quiere ser investigado. Por eso no la traen ahora. Un nuevo gobierno, entrando limpio, sí tendría condiciones para recibir a la comisión”, explicó.
En su conclusión, Pérez reiteró que, aunque técnicamente no es imposible instalar la CICIH este año, políticamente lo ve inviable.
“Esto se va a usar para hacer campaña, especialmente por parte del oficialismo. Pero si no pasa algo realmente extraordinario en estos meses, habrá que esperar a las elecciones y a que otro gobierno, si tiene voluntad, retome el compromiso desde cero”, enfatizó.
Para la socióloga y exrectora de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Julieta Castellanos, la renovación del memorándum de entendimiento entre el gobierno de Honduras y las Naciones Unidas para avanzar en la instalación de la CICIH no fue una sorpresa
La analista consideró que la decisión de la ONU fue acertada, sobre todo para evitar que el oficialismo la utilice como excusa ante el estancamiento del proceso.
“La ONU es un organismo intergubernamental, difícilmente se va a oponer a una solicitud como la ampliación del memorándum, y ha hecho bien en acceder. De esa forma no se le podrá culpar a ella por la falta de avances. Si no lo hubiera hecho, Libre ya tendría una justificación para hacer campaña diciendo que no se logró por culpa de Naciones Unidas”, explicó Castellanos.
Aunque considera que el tiempo que resta de gobierno es insuficiente para lograr la instalación formal de la CICIH, sí cree que hay margen para avanzar en algunos puntos técnicos o en la ruta crítica que el organismo internacional ha venido señalando desde el inicio.
“No es posible que se instale ya, pero sí se puede avanzar en los documentos o en los requerimientos planteados. De lo contrario, todo quedará en una firma simbólica para mantener viva la expectativa”, advirtió.
Castellanos recordó que uno de los principales obstáculos ha sido precisamente el incumplimiento de las condiciones establecidas por la ONU, como la reforma de leyes que limitan la lucha contra la corrupción.
De cara al proceso electoral, la exrectora advierte que la ciudadanía estará más atenta que nunca al manejo de este tema, por tratarse de una de las promesas centrales del actual gobierno.
“Será un tiempo interesante, porque con más interés la ciudadanía estará pendiente de todo lo actuado en este tema”, subrayó, sugiriendo que los costos políticos por no cumplir podrían ser elevados.
Castellanos considera que aún hay posibilidad de que el gobierno saliente realice gestos mínimos de avance en el proceso de instalación de la CICIH, pero duda que haya voluntad suficiente para concretarla.

Escepticismo
La diputada del Partido Salvador de Honduras (PSH), Fátima Mena, reaccionó con escepticismo ante la reciente ampliación por seis meses del memorándum de entendimiento para la instalación de la CICIH.
Mena recordó que esta es ya la quinta prórroga de un documento que, además de no ser vinculante, evidencia la falta de compromiso del Ejecutivo con la lucha real contra la corrupción.
“Después de tres años y medio de gobierno, lo mínimo que se esperaba era que este mecanismo ya estuviera instalado. Esta nueva prórroga no debe ser motivo de alegría, porque lo cierto es que el gobierno no ha cumplido con su promesa”, expresó la congresista.
En relación con el nuevo planteamiento del canciller, quien trasladó la responsabilidad al Congreso Nacional para eliminar el fuero a diputados y alcaldes, Mena fue contundente al señalar que el oficialismo también tiene responsabilidad directa en la falta de avance legislativo.
“Me parece que eso es simplemente lavarse las manos. Los proyectos anticorrupción han estado en la agenda desde 2022 y es Libertad y Refundación quien dirige el Congreso”, subrayó.
Mena recordó que, desde la presidencia del Congreso, se ha boicoteado el trabajo de la Comisión Anticorrupción, incluso destituyendo a diputados que impulsaban reformas.
“Yo presidía esa comisión y me removieron en 2023. Luego también quitaron al doctor Chávez, quien había dictaminado la derogación del fuero parlamentario”, denunció.
Según la diputada, muchos de los proyectos necesarios para dar fuerza legal a la CICIH están listos para ser discutidos y aprobados, como la Ley de Colaboración Eficaz, que ya se encuentra en tercer debate.
Sin embargo, acusa al oficialismo de desviar la atención con propuestas innecesarias, como una reforma constitucional que no fue parte de las condiciones planteadas por la ONU.
Para Fátima Mena, el mensaje es claro: no ha existido voluntad política real por parte del gobierno para establecer un mecanismo independiente y robusto contra la corrupción.
“El Ejecutivo ha demorado todo este tiempo y ahora quiere repartir la responsabilidad, pero la verdad es que el convenio solo lo puede firmar el Ejecutivo, y no ha seguido ni siquiera la hoja de ruta establecida”, dijo Mena.
El vicecanciller de Honduras, Antonio García, celebró este lunes la decisión de extender por seis meses más el memorándum de entendimiento, lo que mantiene viva la posibilidad de instalar la CICIH.
Para García, la extensión otorga el tiempo necesario para que el Congreso Nacional resuelva los cuatro puntos claves que solicita el organismo internacional.
García aseguró que ahora toda la presión recae sobre el Legislativo, ya que las reformas pendientes, como la eliminación del fuero para diputados y la redefinición del rol de los alcaldes, son competencias exclusivas del Congreso.
“Esto es legislativo, duro y puro. Nadie más puede hacer esos cambios, y si se quiere una CICIH con dientes, con independencia y capacidad de actuar, se debe aprobar el marco legal adecuado”, dijo.
El vicecanciller fue claro al advertir que esta es la quinta extensión del memorándum, el cual se mantiene vigente hasta el 15 de diciembre.
“Después del 30 de noviembre, cuando pasen las elecciones, ya no habrá presión para nadie. Si no se hace ahora, no se hará después”, enfatizó.
Asimismo, García explicó por qué la ONU solicita la supresión del fuero especial de los diputados y la responsabilidad legal de los alcaldes.
“Si un diputado comete actos de corrupción, pero tiene inmunidad, no se le puede tocar. La impunidad sigue. Lo mismo con los alcaldes. La justicia no puede estar limitada por privilegios políticos”, subrayó.
Insistió en que el Ejecutivo ya cumplió con su parte y que la ciudadanía debe estar vigilante.
“Creemos que hay un buen ambiente bajo presión. Ojalá los diputados vean esto como una buena noticia y actúen en consecuencia. El tiempo se acaba”, expresó García.