California, Estados Unidos.- La fama digital de Piper Rockelle, una de las figuras más reconocidas entre los infantes influencers de YouTube, ha sido reexaminada tras el estreno del documental "Malas influencias: El lado oscuro de las redes en la infancia" en Netflix.
La producción de tres episodios arroja luz sobre lo que ocurría tras las cámaras del canal que acumuló más de 12 millones de suscriptores, incluyendo graves denuncias contra su madre y representante, Tiffany Smith.
La serie incluye testimonios de exintegrantes del “Squad”, el grupo de jóvenes que protagonizaban videos junto a Rockelle.
Sophie Fergi, una de las voces más contundentes, relató el agotador ritmo que soportaban: “Estábamos grabando 10, 15 videos al día (...) Me iba a dormir como por dos o tres horas, me levantaba alrededor de las 6 o 7 para hacer la escuela, cerraba la tablet y ya tenía que alistarme para grabar. No teníamos descanso”.
Detrás de esa constante producción se encontraba Smith, madre soltera y figura dominante en la carrera de Rockelle desde su infancia en concursos de belleza.
En fragmentos de programas como Dance Twins, incluidos en el documental, se observa la presión que ejercía: “Este es un muy buen momento para que obtengas el primer lugar”, se le escucha decir. “Me gustaría eso”.
En 2022, una demanda colectiva presentada por 11 menores entre los 10 y 16 años acusó a Smith, al productor Hunter Hill y a Piper Rockelle Inc. de exponerlos a condiciones alarmantes durante la grabación de cientos de videos entre 2017 y 2020.
Los demandantes aseguraron haber sido víctimas de “abuso emocional, verbal, físico y, en ocasiones, sexual”, y denunciaron que jamás recibieron compensación económica pese a que el canal generaba ingresos de “varios cientos de miles de dólares al mes”.
Smith respondió con una contrademanda por 30 millones de dólares. El conflicto concluyó el pasado octubre con un acuerdo por 1.85 millones de dólares.
Ni Smith, ni Rockelle, ni Hill accedieron a dar entrevistas a los realizadores de la docuserie.
Rockelle defiende a su madre
No obstante, en una declaración enviada a USA Today, Rockelle defendió a su madre: “Honestamente, solo quiero dejar todo esto atrás porque es muy doloroso lidiar con esto cada día. Y, no sorprendentemente, mi salud mental ha sufrido más de lo que cualquiera imagina”, afirmó.
“Las acusaciones son crueles, falsas y, honestamente, todo se trata de dinero. Mi mamá no hizo ninguna de esas cosas que dijeron. Y apoyaré a mi madre hasta el final”, continuó la joven creadora de contenido.
A pesar de que YouTube desmonetizó su canal en 2022 tras la demanda, Rockelle continúa activa en redes sociales.
Mantiene 6.1 millones de seguidores en Instagram y 14.7 millones en TikTok, plataformas en las que publica bailes y momentos junto a su pareja, el influencer Capri.
En uno de sus últimos vlogs, confesó el desgaste que implica sostener esa vida pública: “Obviamente filmo vlogs como este, pero no obtengo mucho más que la satisfacción de saber que ustedes disfrutan verlos (...) No tengo derecho a quejarme porque las cosas podrían ser mucho peores. Pero lo que sí puedo decir es que es un trabajo duro para mí. Nunca he tenido un empleo normal, pero lo que hago ahora se siente como uno. Me consume mucho”.
Actualmente, el paradero y situación legal de Smith permanece en la sombra.
Mientras tanto, la figura de Rockelle sigue generando atención, aunque la polémica alrededor de su éxito precoz ya dejó una huella en la cultura de los influencers infantiles.