Tegucigalpa, Honduras.- Mientras la industria de la música cuenta entre sus filas a artistas que no logran conectar profundamente con sus fans más allá de sus canciones, Camilo es otra historia.
Desde sus inicios se mostró auténtico y sencillo, cualidades que le han permitido mostrarse cercano a sus seguidores, que poco a poco fueron descubriendo las capas de su personalidad: el Camilo romántico y emocional, el positivo y optimista, y el espiritual y reflexivo.
Su tarea no solo ha sido cantar en un escenario o preparar música en la intimidad de un estudio, también ha sido conectar desde las redes sociales, plataformas que maneja él y en las que comparte un poco más de su cotidianidad, permitiéndole a la gente acercarse no al famoso, sino al humano común.
Y a este Camilo que los hondureños irán a ver y escuchar el viernes 21 de febrero en el Palacio de los Deportes de la UNAH, donde el silencio de la noche se romperá con un repertorio de canciones que le harán recordar la belleza del amor y el sufrimiento del desamor.
Pero también el valor de la familia, la importancia de la felicidad, la autenticidad y los sueños, desde esa voz aguda y nasal que ha caracterizado la identidad del artista, que ha pasado de ser solo un cantante pop juvenil, a una de las voces más consolidadas de la música latina actual.
Recuerde que el precio de las entradas es: Zona BMP, L 3,705.00; butaca central inferior, L 2,100.00, y butaca central superior, L 988.00. Los boletos están a la venta en BMT.
