Tegucigalpa, Honduras.- El último mes de cada año es esperado por la mayoría de los asalariados debido a que se recibe doble compensación económica.
A partir de 1982 todos los trabajadores permanentes, jubilados y pensionados tienen derecho al pago del décimo tercer mes en concepto de aguinaldo con base al decreto 112.
El artículo 11 de la normativa establece que este beneficio se pagará en diciembre de cada año, sin embargo, las partes podrán pactar su desembolso en distinta fecha.
Otra de las disposiciones de la referida legislación indica que tendrán derecho al aguinaldo de conformidad al tiempo laborado los trabajadores permanentes que al 31 de diciembre de cada año no hayan cumplido 12 meses de servicios continuos con un mismo patrono.
“El décimo tercer mes en concepto de aguinaldo se pagará calculando con base en el promedio de los salarios ordinarios percibidos durante el tiempo trabajado en el año de que se trate. En la pequeña y mediana industria, artesanía, agricultura y ganadería en pequeña y mediana escala se pagará con base en el promedio de los salarios mínimos percibidos durante el tiempo trabajado”, se subraya en el artículo 12 del decreto.
Aunque para muchos este pago adicional se suele emplear para gasto corriente, otros consideran que puede invertirse.
Dinero y Negocios (D&N) consultó a la consejera financiera Ali Kafie qué es lo más conveniente y cómo se le puede dar un buen uso a este bono que se recibe en temporada de Navidad y Año Nuevo.
Administrar
“Tu decimotercer mes (aguinaldo) es el resultado de 12 meses de esfuerzo y dedicación. Hay que verlo como una bendición que merece ser administrada con sabiduría, disciplina, planificación y equilibrio”, mencionó.
La especialista destacó que “lo primero que debemos hacer es anticiparnos y planificar este dinero sobre el papel; una buena estrategia es dividir tu aguinaldo en porcentajes para presupuestarlo y ver cómo se distribuirán esos fondos”.
El 50% del aguinaldo se puede destinar para el cumplimiento de obligaciones y deudas; el 30% para ahorro e inversión, mientras que el 20% para darse gusto en compra de regalos u otras finalidades particulares, sugirió.
Además, recomendó que “si tienes deudas en tarjetas de crédito o préstamos usar una parte del aguinaldo para reducir o pagar estos compromisos es, sin duda, la mejor inversión que puedes hacer”.
Con este dinero se puede crear o completar un fondo de emergencia que es un ahorro que se utilizará para imprevistos como una enfermedad o reparación urgente, siendo el objetivo acumular el equivalente a tres y seis meses de gastos básicos, sostuvo Kafie.
Planteó que la inversión personal a través de un curso, una certificación o herramientas para mejorar en el empleo, incluso hacer un chequeo médico son otras de las opciones.
Si las deudas se encuentran bajo control es posible pensar con el aguinaldo en el ahorro para la prima de una casa, terreno hasta un vehículo, aseguró la entrevistada.
Errores a evitar
Entre los errores que se deben evitar con el aguinaldo, señalo que es “gastarlo todo en consumo durante esta época. La felicidad momentánea puede dar paso a un enero muy ajustado”.
La experta en finanzas, mercadeo y emprendedurismo mencionó que “pensar que es dinero caído del cielo y derrocharlo. Es el fruto de tu esfuerzo de todo un año”, es otra de las equivocaciones que se pueden cometer.
“Competir o compararte con los demás; enfocarse en su realidad y en sus metas financieras”, enfatizó la asesora.
Instó a regalar con sentido en esta época, estableciendo un presupuesto claro y elaborar una lista de las personas a las que quiere darse un presente al asignarse un límite de gasto conforme a la realidad personal.