Del mercadeo artesanal del Savio en Santa Rosa de Copán (con el famoso y antiguo 'parlanteo' por las calles) a la inexistente oficina de marketing del Olimpia; así de cambiante, de inexpresiva y hasta sorpresiva es la realidad del merchadising en los clubes de Primera División...
Tras el repaso que se hizo por la mercadología del Verde, un ejemplo a tomar en cuenta por el resto de equipos, Zona preguntó en Olimpia si hay un laboratorio encargado de promover la imagen del Albo. Miguel Flores Cisneros, uno de los directivos más cercanos a la presidencia, contestó con toda la sinceridad posible: 'Me da pena decir que en el club no tenemos actividades propias de mercadeo'. Sin palabras...
Entre claro y oscuro...
Aunque está claro que el equipo no vive de taquillas ni que desaparecerá si la gente no llega en masa al estadio Nacional, la lejanía entre la dirigencia y sus aficionados resiente al importante núcleo de la población que respira los colores del Rey de Copas.
'Un club como el Olimpia debería tener ya, en estos momentos, una oficina de mercadeo en funciones, donde se pueda proyectar la imagen del club, hacer promociones, capturar nuevos proveedores, patrocinadores que no sean necesariamente los de la camiseta, e interactuar con nuestros aficionados', suma Flores Cisneros, cuyas palabras contrastan con las que vienen desde Puerto Cortés...
'El Platense tuvo acceso a un préstamo bancario de 100 millones de lempiras, que será manejado a través de un fideicomiso por tres torneos ligueros, para establecer un flujo de caja e iniciar un plan estratégico de mercadeo. Pero, en el futuro, la meta es automantenerse', revela Róger Martínez, encomendado por la dirigencia del Tiburón para dar a luz una propuesta que le producirá un beneficio importante al primer club que se formó como sociedad anónima en Honduras.
Se trabaja con las uñas...
El sistema mercadológico, que consiste en satisfacer las necesidades del cliente y, al mismo tiempo, obtener ganancias, es algo así como una materia poco descifrable para la mayor parte de los clubes hondureños.
'Los dirigentes todavía no están preparados para una gerencia de mercadeo y lo digo por experiencia propia. A veces cierro un trato y al dirigente no le parece y así es muy difícil trabajar; pero, en definitiva, los entiendo, porque en nuestro fútbol es raro el tema del mercadeo. Raúl Graugnard en algún momento lo intentó en Motagua y luego desistió', comparte su experiencia Carlos Ferrari, periodista que desde el 24 de mayo de 2011 trabaja para mercadear el nombre de Necaxa en la zona sur.
Desde el occidente, Francisco Herrera también se une a la idea de Ferrari: 'Acá el dirigente solamente busca ganar el domingo y volver a ganar el otro domingo, pero no ve a largo plazo'. En la plaza de los mayas abunda el 'parlanteo', precisamente porque 'los clubes todavía no tienen establecido el concepto de mercadeo, no entienden que hay que pagarle a una persona que sepa para que produzca dinero y se gane su comisión al mismo tiempo'.
Choloma apela a los maquiladores...
Choloma es el caso más reciente en la A: se fundó en 2009 y, desde entonces, funciona una oficina de mercadeo en el club, contó Javier Hernández, su titular; aunque no habló de estudios científicos para analizar la ausencia de público en los partidos disputados ante equipos chicos, el presi del Toro confió que 'la gente no llega porque transmiten los juegos por televisión sin bloquear la imagen para la ciudad. Pero acá tenemos un promedio de mil personas por juego y, lógico, cuando llegan los grandes hay mayor convocatoria'.
El foco de población esencial al que se proyecta el Toro es el trabajador de la maquila: 'Vendemos camisetas y regalamos boletos para atraer público, recuerde que hay 80 mil maquileros en la ciudad; además, está la promo para que el obrero vaya gratis la primera vez al estadio, así se le crea el hábito'.
Por último, Hernández confió que, muy pronto, se iniciará un proyecto para 'construir, junto con la alcaldía, una gradería para ocho mil personas en el estadio Rubén Deras y se edificará palcos de gran nivel. En el Atlético Choloma dependemos de la presencia del público en las gradas', sentenció.
No hay acciones...
El afluente desemboca en una conclusión excluyente: mientras los equipos lloran la ausencia de la gente y exigen que los aficionados regresen a los estadios, hay pocos esfuerzos concretos y visibles que se puedan aplaudir; se salvan los costeños Marathón, España y Platense, al tiempo que el Motagua empieza a caminar y los clubes pequeños deambulan entre la fantasía y una realidad que los agobia.
