Además de ejercer la tracción para mover el auto cuando se presiona el acelerador, soportar la carga y absorber irregularidades de la carretera, las llantas cumplen funciones de seguridad, entre ellas, detener el auto ante una frenada de emergencia y reducir el derrape al agarrar una curva.
Es por ello que antes de emprender un viaje el conductor debe verificar que la banda de rodadura esté en buenas condiciones. También es importante verificar la presión de aire, ya que una presión incorrecta no solo incrementa el consumo de combustible, sino que provoca un desgaste irregular de la banda de rodadura y facilita que estas se estallen cuando se calientan.
“Después de cinco años, tomando como base la fecha de producción, los materiales de la llanta pierden sus propiedades físicas y químicas, lo que representa un peligro”, dijo Walter Sánchez, jefe de taller Tecnicentro Allas.
¿Cómo identificar una llanta dañada?
- Vibraciones en el timón: en este caso se debe hacer una inspección visual de las llantas, pues estas al tener deformaciones provocan vibraciones.
- Banda de rodadura desgastada: los neumáticos disponen de un indicador de rodaje ubicado entre las ranuras.
- Hule agrietado: con el paso del tiempo y producto de las inclemencias del ambiente, el material del que está hecha la llanta se deteriora produciendo grietas, motivo suficiente para que tome la decisión de sustituirlas por unas nuevas.
'Antes de comprar una llanta nueva se debe verificar el DOT, este dato permite identificar si está vencida o por vencer”. Walter Sánchez, Tecnicentro Allas.
