Para impresionar a sus amigos, Birch hizo un back flip (voltereta hacia atrás)
que le salió mal, sufrió fractura en el cuello y permaneció inconciente. Cuándo despertó sufrió un cambio increíble en su personalidad; se convirtió en homosexual.
Luego del accidente, su madre y su novia estaban alrededor de la camilla esperando que despertara y las primeras palabras del hombre fueron conmocionantes: “Yo soy gay”.
Su novia, a quien estaba a punto de pedirle matrimonio, quedó impactada con el cambio de personalidad y sobre todo con el cambio de sexualidad.
Birch que en unos meses pasó del corpulento peso rugbier de 120 kilos a unos magros 69 kilos enunció: “Se que sueña extraño, pero cuando volví en mí inmediatamente me sentí diferente. Ya no estaba interesado en las mujeres. Nunca estuve interesado en hombres antes, ni tampoco tuve amigos gay, pero no me importa quien era yo antes, tengo que ser verdadero con mis sentimientos”.
En su antigua vida, pasaba los fines de semana con sus amigos bebiendo cerveza y mirando deportes, pero luego de su accidente empezó a frecuentar menos a sus amigos y cada vez lo aburría más el rugby. Empezó a hacer cursos de peluquería y tiene su propio salón de belleza.
Además ya tiene compañero en esta nueva etapa, ya que está saliendo con un hombre que conoció en un night club. También cambió de look. “Ahora la gente no me reconoce en la calle”, dijo.
El joven dijo que un neurólogo al que consultó le explicó que su transformación pudo deberse a la 'apertura de una parte diferente del cerebro' tras el accidente, y que las apoplejías pueden tener gran impacto en la vida de las personas que las sufren, haciendo –por ejemplo- que revaloren sus sentimientos.
