Cansados de esperar durante décadas la conexión al sistema de alcantarillado, los pobladores de diferentes barrios y colonias de la capital han decidido ejecutar por su cuenta proyectos sanitarios.
Y es que al menos el 20 por ciento de los habitantes de la ciudad, es decir 300,000 capitalinos, no tienen acceso a este servicio básico que debería ser habilitado por el Estado.
Julia Ortega, residente de la colonia Alemania, es uno de los miles de capitalinos que han vivido un sueño casi eterno por deshacerse de la vieja letrina que durante el invierno se rebalsa y que provoca un ambiente de insalubridad insoportable.
“Los olores son nauseabundos. A los niños los tenemos encerrados para que no tengan contacto con el agua sucia y ya no tenemos ningún espacio para hacer otra letrina”, manifestó.
Igual que doña Julia, los padres, cabezas de hogar de las 110 familias que residen en la zona, se embarcaron en la lucha por derribar esta barrera.
María Antonieta Pineda, presidenta del patronato de la comunidad, relató que el proyecto comenzó con un capital semilla de 200 mil lempiras, recaudados por los vecinos.
“Cómo para ejecutar el proyecto requeríamos 1.3 millones de lempiras, nos vimos en la necesidad de buscar financiamiento en la banca nacional y así completar el monto requerido”, detalló.
Después de casi seis meses de labores por turnos, donde los colonos, luego de su trabajo, abrieron las calles, construyeron pozos de inspección y habilitaron pegues, la obra avanza en un 90 por ciento.
En total fueron 1,000 metros de tubos lineales los que se instalaron, además de 40 pozos de inspección, construcción de gradas y cunetas en la zona, cajas domiciliaras y fosas sépticas.
Actualmente solo falta que todo el sistema sea conectado a la red habilitada frente a Mall Premier.
“Ya estamos gestionando los permisos para abrir la calle donde se ubica el pozo principal y esperamos que a más tardar a finales de mayo logremos ver nuestra obra en funcionamiento”, aseguró.
El proyecto beneficiará a unas 10 colonias más, entre estas la Brasilia, Carrizal número 1, Carrizal número 2, Cerro Grande, Brisas de Olancho, El Zapote y Policarpo Paz.
Un creciente desafío
Igual que los residentes de la Alemania, cientos de capitalinos de zonas como la Villa Nueva, sector II de Las Torres, sector 17 de Septiembre y Las Brisas de la Nueva Suyapa han tomado las riendas de este tipo de programas.
En la colonia Villa Nueva, unas 1,200 familias de los sectores uno y dos gestionaron el financiamiento de un proyecto sanitario con el Congreso Nacional.
A un costo de 23 millones de lempiras, los colonos ejecutan los trabajos de habilitación del sistema.
René Sánchez, presidente del patronato, indicó que se ha avanzado en la construcción de 40 pozos de inspección que se hicieron con fondos de la comunidad.
La ejecución de la obra en estos dos primeros sectores es solo el inicio de una conexión completa, pues la comunidad está dividida en nueve sectores.
Unos 200 colaboradores trabajan a doble turno para culminar la obra antes que inicie el invierno.
Pobre inversión
Ante esta realidad, las autoridades del Servicio Nacional Autónomo de Acueductos y Alcantarillado (SANAA) reconocieron que la falta de presupuesto impide el avance de conexiones sanitarias.
Para este año, el ente autónomo solo dispone de un fondo de ocho millones de lempiras para ampliar la red de distribución de agua y el sistema de alcantarillado sanitario de la ciudad.
Estos fondos que forman parte del recurso rotatorio del programa Agua para Todos solo se pueden distribuir en nueve proyectos de alcantarillado y 10 de agua potable.
Ricardo Velásquez, subgerente del SANAA, informó que otra de las apuestas de la entidad para ampliar el sistema es el programa Barrios en Desarrollo, con el que se ha logrado llegar a 60 colonias.
“En estas comunidades se ha instalado la red de agua potable y alcantarillado con el apoyo de la comunidad, los vecinos dan un aporte de entre el 25 y 35 por ciento del costo de la obra”, pormenorizó.
Insuficientes
Pero estos pequeños pasos de la entidad resultan insuficientes ante la necesidad de las comunidades.
Solo en la colonia Villa Nueva, aun al concluir el actual proyecto, unas 8,800 familias se quedarán sin acceso a este servicio prioritario.
A la falta de conexiones nuevas se suma el deficiente estado de la red sanitaria ya instalada.
Según datos del SANAA, el 60 por ciento de las tuberías de alcantarillado se encuentran en mal estado.
Los colapsos de las cloacas durante el invierno no son más que la evidencia de este deterioro que amenaza no solo la salud de los capitalinos sino la debilitada red vial por las filtraciones de agua.
Velásquez informó que para la reparación de la infraestructura y del alcantarillado demandan una inversión de 60 millones de dólares, equivalentes a 1,200 millones de lempiras.
Estos recursos no se encuentran en las arcas de la institución, por lo que el SANAA gestiona los fondos con organismos de cooperación internacional.
El déficit presupuestario solo avizora que la ampliación de la red de alcantarillado sanitario seguirá siendo una materia pendiente del ente autónomo.
“Estuvimos 40 años a la espera de este sistema”
María Antonieta Pineda, presidenta del patronato de la colonia Alemania, aseguró que si los vecinos no se hubieran puesto manos a la obra seguirían inundados de aguas negras.
“En esta colonia la mayoría de las viviendas contaban con letrinas, pero a estas alturas ya no hay espacio para abrir nuevas fosas y necesitábamos dar un paso adelante”, afirmó.
Doña María relató que el proceso fue lento y tardío, pues la recaudación del dinero necesario para instalar el sistema fue complicada, ya que la mayoría de los habitantes de su comunidad son personas de escasos recursos.
“Aún ahora que estamos a punto de concluir el proyecto hay personas que no pudieron pagar, pero brindaron su mano de obra y de una u otra forma se van a beneficiar”, indicó.
En esta semana, los pobladores de la colonia abrirán la calle principal para conectar la nueva red instalada al pozo principal y así tener su sistema completo, un sueño que anhelaron durante cuatro décadas.
“Trabajamos a doble turno para culminar”
La fuerza de voluntad de los residentes de la Villa Nueva se ha mantenido inquebrantable ante el deseo de culminar su proyecto de alcantarillado sanitario.
René Sánchez, presidente del patronato, aseguró que actualmente la labor de los 200 voluntarios se ha duplicado ante la llegada inminente del invierno.
“En este momento se trabaja en la construcción del colector principal, que está ubicado en la parte baja de una quebrada; por este motivo hemos tenido que agilizar los trabajos”, detalló.
Después de cumplir esta ardua tarea se pretende trabajar en la red de distribución interna, donde ya existe un avance de al menos 40 pozos que se hicieron con participación de la comunidad.
Don René asegura que ante la falta de presupuesto del SANAA decidieron tocar diferentes puertas hasta lograr el financiamiento de l sistema. “Es una necesidad innegable que debíamos atender”, aseveró.