'No me mates papito, no me mates', eran los gritos de súplica del conductor del autobús de la empresa Impala asesinado la noche de este lunes junto con una pasajera en el barrio Barandilla de San Pedro Sula, norte de Honduras.
El sangriento hecho en el que dos personas perdieron la vida de manera violenta se registró en horas de la noche y aunque las autoridades aún no conocen la causa del doble crimen, no descartan que se trate por el cobro de extorsión.
De acuerdo con la información que se conoce hasta el momento, los sujetos fuertemente armados atacaron a sus víctimas con armas de fuego, calibre desconocido.
Según narró entre lágrimas el ayudante del ahora occiso, éste clamó por su vida segundos antes de recibir los impactos sobre su cuerpo.
Esta mañana los transportistas de la empresa Impala han mantenido una toma en uno de los accesos del bulevar del Norte en protestas por los últimos asesinatos de compañeros.
Cabe recordar que el pasado mes de noviembre, una de las unidades de esta empresa fue atacada a disparos y al menos siete personas resultaron con heridas considerables.
Asimismo, un mes antes, en octubre de 2016, un conductor de estos autobuses fue asesinado a disparos mientras realizaba su labor en San Pedro Sula.