Tegucigalpa, Honduras.- Un posible cementerio clandestino fue descubierto la tarde de este viernes en la colonia 28 de Marzo, aledaña a Prados Universitarios, en la capital de Honduras.
Las alarmas se encendieron al detectar lo que parecía un cadáver; sin embargo, tras una inspección más minuciosa, las autoridades determinaron que contrario a lo inicialmente se creía no eran restos humanos sino de perros.
En el operativo e inspección de las autoridades policiales fue ubicado los primeros restos dentro de una bolsa plástica negra, semienterrado, mientras que a pocos metros del primer cuerpo se detectó señales de una segunda fosa.
La escena delató la presencia de más cuerpos debido al fuerte hedor, detallaron las autoridades que más tarde confirmaron que se trataba de un botadero de animales muertos.
Los restos de animales fueron ubicados en una zona montosa y de difícil acceso, por lo que se sospechaba que pudiera ser utilizada por delincuentes.