TEGUCIGALPA, HONDURAS.-Como Carmen Irene Canales Bude, de 39 años de edad, fue identificada la mujer que fue ultimada por sus propias compañeras de celda en la Penitenciaría Nacional Femenina de Adaptación Social (PNFAS).
La privada de libertad estaba interna en el reclusorio femenino, en el módulo donde habitan las integrantes de la Pandilla Barrio 18.
El pasado miércoles 10 de junio se tuvo conocimiento de una nueva reyerta en ese penal en horas del mediodía, sin embargo, el Instituto Nacional Penitenciario (INP) descartó tal extremo.
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Fue hasta las 4:45 de la tarde de ese día, que el mismo INP notificó de la riña suscitada y que producto de ello había fallecido una de las convictas.
Este ente carcelario informó que a la hora antes referida, mujeres simpatizantes de la Pandilla 18 abrieron el portón del hogar en el que conviven y ahí dejaron en el pasillo el cadáver de la privada de libertad envuelto en una sábana.
La mujer de 39 años de edad, originaria de La Lima, departamento de Cortés, habría sido asfixiada por sus mismas compinches de esa organización criminal, por razones hasta hoy desconocidas.
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Las autoridades del penal se comunicaron con la Policía Nacional y el Ministerio Público para hacer el levantamiento respectivo e iniciar con el proceso de investigación sobre el crimen.El cuerpo fue ingresado a la morgue del Ministerio Público.
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