La vanidad ya no es cuestión solo de mujeres, es una característica que están adoptando muchos hombres modernos.
Tener un atractivo o un ego grande puede ser la debilidad que los lleva a una obsesión por estar frente al espejo, peinándose, siempre perfectos. Si este tipo de hombre con aptitud narcisista tiene novia o esposa ella puede llegar a sentirse desplazada a segundo plano mientras él cuida solo su aspecto.
¿Por qué te molesta?
La vanidad la tenemos todos, y si antes el hombre se enfocaba más en mostrar fortaleza y masculinidad, digamos que ahora tiene otra prioridad más, su imagen. “En este caso podríamos mencionar la palabra “Metrosexual”, es un nuevo hombre del siglo XXI, incluso decir que es un “narcisista”. Los problemas van a depender del tipo de pareja, si ésta lleva el mismo grado de vanidad o no. “Los problemas que puede traer desde el punto de vista de pareja, es desconfianza en muchos casos. Las mujeres piensan en infidelidad”, explica Victoria Bendeck, psicóloga, porque el hombre ya no está tan pendiente de ella, pasa tantas horas en el espejo que se le olvida llamarla, salir a citas, decirle que es bonita incluso.
No te equivoques
No dudes de su masculinidad, aunque la sociedad les ve con dudas en cuanto a su orientación sexual,
porque adoptan parte de la estética gay, esto no significa que lo sean. “Con el hombre no hay nada de malo que quiera verse bien, siempre y cuando no se convierta en una obsesión”.
Podríamos explicar mejor con el siguiente ejemplo, ¿Qué sucede con el hombre cuando la mujer es la que gana más dinero? ¿Qué siente él al respecto? “Se puede decir que sucede lo mismo desde el punto de vista emocional y personal”, comenta la psicóloga. Lo mejor para superar esto es que tu tengas en primer lugar buena autoestima y algo de vanidad también, pero sobre todo hablar este problema con la pareja.
CONSEJO PARA AMBOS
- Vanidoso pero sin exceso:
El hombre puede adoptar la estética a un grado que a ambos les funcione, ¡sería perfecto!.
- Así podrás tomar una decisión:
La mujer debe plantearse si realmente le molesta que el hombre sea más vanidoso que ella.
-La vanidad toma prioridad:
Como mujeres debemos pensar que ahora la sociedad exige hasta cierto punto que todos “nos veamos muy bien”.
Victoria Bendeck
Psicóloga
vicb_7@hotmail.com