Fomento de lectura infantil
Después de servir durante 150 años como una de las más temidas cárceles de Holanda, Het Arresthuis, en Roermond, ha sido convertida en un hotel de lujo del que, sin duda, nadie quisiera escapar.
Het Arresthuis abrió sus puertas en 1862 como una prisión. Sin embargo, en la actualidad el fin para que fue construida se ha transformado.
La cárcel cerró en 2007 sus operaciones y ahora la instalación se ha transformado en un lujoso hotel, donde los huéspedes pagan cuantiosas sumas de dinero para pasar al menos una noche en una de las celdas de detención.
El nuevo hotel, rediseñado con elegantes motivos, cuenta con estancias amplias y modernas. Pero mantiene su rica historia y algunas características del viejo centro penitenciario.
Pero claro que “celda” no es una palabra adecuada para describir a las increíbles habitaciones del hotel, equipadas con grandes pantallas de LED, Wi-Fi gratis, cómodas y mullidas camas y hasta una máquina de café.
Las pasarelas, barandales y puertas de acero negro, piezas originales, permanecen para mayor atractivo del hotel, dan un aspecto de gran seguridad; además, se conservan las antiguas puertas de las celdas de aislamiento que crean un efecto espectacular.
El albergue cuenta con 36 lujosas habitaciones y 7 suites.
Entre ellas, se encuentran 4 suites especiales que llevan por nombre: ‘El director’, ‘El carcelero’, ‘El abogado’ y ‘El juez”.
Además, entre los espacios comunes que los huéspedes, pueden utilizar, hay un sauna, un gimnasio equipado con máquinas de última tecnología, un hermoso y cuidado jardín y, por supuesto, un amplio lobby con todas las comodidades. La comida es otro punto importante del hotel.
En Het personal Arresthuis los clientes pueden optar por una cena especial ambientada como un almuerzo típico de prisión. Los huéspedes son invitados a que se vistan como presos con ropa de cárcel, pero el menú es mucho más delicioso y completo que lo que los reos acostumbraban a comer.
