Se celebra hoy en Honduras el Día del Árbol, una fecha instaurada desde 1926 con el propósito de promover la conservación del medio ambiente, con especial énfasis en el pino, declarado como Árbol Nacional, gracias a su diversidad, con siete especies, y abundancia en la foresta nacional.
Sin embargo, con el paso del tiempo, es un objetivo que no se ha logrado, ya que año con año somos testigos de cómo se reducen nuestros bosques, por diferentes factores, entre los que resaltan los incendios forestales y la tala, que año con año reducen a escombros miles de hectáreas; sin olvidar los destrozos causados por otras plagas, como la del gorgojo descortezador del pino, que hace unos años causó destrozos.
Las cifras sobre la deforestación en el país solo dejan en evidencia la gravedad de la situación. Según datos de estudiosos del tema, entre 2016 y 2024 más de un millón de hectáreas de bosques fueron afectadas por los incendios forestales, tala ilegal y cambios en el uso del suelo, principalmente para ganadería extensiva.
El año pasado, EL HERALDO evidenció en una serie de investigación la destrucción de la Biósfera del Río Plátano, uno de los principales pulmones de la humanidad, y cómo en ese lugar los narcos, con los sembradíos de plantas de coca y la construcción de carreteras clandestinas, más la ganadería y explotación del bosque acaban con esta reserva de la humanidad.
Esta fecha es oportuna para que hablemos del tema, enseñemos a nuestros niños y niñas la importancia de salvaguardarlos, y que las autoridades correspondientes tomen las acciones necesarias para evitar que se sigan destruyendo los recursos con los que todavía cuenta el país.
La lucha por la defensa de los recursos naturales y del medio ambiente es una tarea conjunta que requiere la participación activa y coordinada de todos los sectores de la sociedad
