Cuando éramos niños, sentíamos que el tiempo pasaba más lento, y ahora que hemos crecido, nos damos cuenta de que el tiempo transcurre más rápido. Resulta que eso tiene una explicación. Cuando tenemos 8 años, un año representa 12.5% de tu vida, pero cuando tienes 40, representa solo el 2.5%, esto nos hace sentir que periodos “idénticos” se perciban muy diferente. Cuando somos niños todo se siente distinto, porque todo es nuevo, cada cosa se vuelve un descubrimiento.
Para percibir el calor debemos sentirlo, para percibir el aroma de una fragancia debemos olerla, las primeras veces suele ser interesante, ya después se vuelve una costumbre. En ese mismo orden de ideas, debemos entender que hay naciones que quizá, por su historia, tienen mayor experiencia en diferentes temas y para nosotros sean completamente nuevas, como el caso del niño de 8 años, a veces se requiere observar que ha hecho aquella persona que tiene 40 años, como ha manejado “X” o “Y” situación, aprender de sus buenas experiencias y sus desafíos, dicen que es de personas inteligentes aprender de nuestros errores, pero es de sabios aprender de los errores ajenos.
Cuando hago alusión de estudiar casos de otros países, no digo que debemos viajar a él, digo que podemos leer su historia, analizar su contexto y, claro, si es posible viajar, hacerlo para conocer relatos y opiniones de primera mano y tener una radiografía más clara de su situación e historia. Honduras no está solo en el mundo, es un Estado con sus aciertos y sus problemas, tal y como otros Estados, somos una República digna, llena de cultura, recursos, y sobre todo, bellas personas.
Es importante no solo analizar experiencias de otras naciones, sino también aprender de nuestras lecciones y siempre posicionar los dotes y cualidades de Honduras, exponer aquellas cosas que hacen de Honduras un país 5 estrellas. Para fortalecer la economía nacional se requiere también de otras naciones, de establecer relaciones comerciales y diplomáticas, relaciones que sean de colaboración y no de subordinación.
Así como Honduras tiene mucho que apreciar de otras naciones, el mundo también tiene mucho que observar en Honduras, hagamos que nos aprecien por lo que somos, no por lo que la clase política de Honduras refleja, los hondureños somos más que eso, y es ahí donde surge el problema que los hondureños debemos solucionar, si queremos pasar de 8 años a 40 años tal, y como colocábamos en el ejemplo anterior, debemos aprender e intentar nuevas cosas, no podemos seguir repitiendo lo mismo todo el tiempo, para ver resultados diferentes, debemos actuar diferente, para eso nos sirve y ayuda la visión internacional.
