TPS: golpe humano y económico

¿Cómo enfrentarán los abuelos o los padres de familia en Honduras la noticia de que el hijo que los sostenía deberá abandonar su trabajo y su vida? Estas son las preguntas que deberían guiar el debate, no solo los tecnicismos legales ni los cálculos políticos

  • 20 de octubre de 2025 a las 00:00

La determinación del gobierno de los Estados Unidos de poner fin al Estatus de Protección Temporal (TPS, por sus siglas en inglés) para unos 55 mil hondureños marca el inicio de una crisis humanitaria que trasciende fronteras. No se trata únicamente de una decisión migratoria, sino de una acción que golpea directamente la esperanza de miles de familias que durante más de dos décadas han construido su vida entre la nostalgia, el trabajo y la solidaridad hacia los suyos en Honduras. Los beneficiarios del TPS llegaron a Estados Unidos huyendo de la devastación que provocó el huracán Mitch en 1998. Con el paso del tiempo, la mayoría logró integrarse a la sociedad estadounidense, trabajando en sectores esenciales como la construcción, los servicios, la limpieza, la salud y la agricultura. Muchos son hoy padres y madres de hijos estadounidenses; otros sostienen con su esfuerzo a familiares que permanecen en Honduras. De su trabajo provienen las remesas que mensualmente mantienen a flote a miles de hogares en nuestro país. La cancelación del TPS no solo amenaza con desintegrar familias, sino que coloca a Honduras ante un riesgo social y económico profundo. Las remesas, que representan más del 25% del PIB nacional, son la principal fuente de ingresos para millones de personas. Su eventual reducción afectará directamente el consumo, el empleo y la estabilidad de comunidades enteras que dependen de ese dinero para alimentarse, educar a sus hijos o pagar servicios básicos. La pérdida de esos ingresos significará también el aumento de la pobreza y la migración irregular.

Pero más allá de las cifras, este es un drama humano. ¿Qué hará una madre que durante 20 años ha trabajado y criado a sus hijos en Estados Unidos si de pronto se le obliga a regresar a un país donde ya no tiene casa ni empleo? ¿Cómo enfrentarán los abuelos o los padres de familia en Honduras la noticia de que el hijo que los sostenía deberá abandonar su trabajo y su vida? Estas son las preguntas que deberían guiar el debate, no solo los tecnicismos legales ni los cálculos políticos.

Únete a nuestro canal de WhatsApp

Infórmate sobre las noticias más destacadas de Honduras y el mundo.
Te gustó este artículo, compártelo
Últimas Noticias