Tegucigalpa, Honduras.- El sueño de siete años de Marlón Martínez se está haciendo realidad con la llegada de Rosalinda a Coyolito, Amapala, en el Pacífico de Honduras.
"Hoy han tirado el barco (Rosalinda) al mar y me di cuenta de que tuvieron algunos inconvenientes. El velero está flotando, no se ha hundido como de repente se ha dicho en las redes sociales", aclaró el alcalde de Amapala, Santos Alberto Cruz.
El entrevistado confirmó a EL HERALDO que el velero Rosalinda está flotando y que se le realizarán algunos ajustes necesarios para que pueda navegar.
"Mañana a primera hora me voy a comunicar con la Marina Mercante para que me informe qué inconvenientes han tenido, porque sí vi la embarcación y está flotando", informó el edil de Coyolito.
Cruz refirió: "Le vamos a seguir apoyando en lo que podamos, porque he visto que ha hecho un esfuerzo bastante grande en tiempo e inversión económica. Vamos a hablar con la Marina Mercante para ver cómo le podemos ayudar", indicó el alcalde de Coyolito.
"He leído que se hundió en el mar, cuando la embarcación está sobre el agua", insistió el alcalde del sector.
Amplió que hay que hacer algunos ajustes para que la embarcación pueda navegar, y que esto se logrará con el apoyo de la Marina Mercante.
Por otra parte, expresó que se siente contento de que Marlon haya podido llegar a un lugar de destino como el Golfo de Fonseca. "Ya el propósito de él era poder tirar su embarcación al mar".
Recuerde que no es lo mismo tener una embarcación en tierra que en el agua", explicó el edil del municipio del sur de Honduras.
Rosalinda es el velero que por siete años construyó como un sueño el carpintero capitalino Marlón Martínez.
Es el primer barco capitalino construido en la ciudad, levantado pese a muchos obstáculos en el camino.
Este navío lleva el nombre de su esposa, y desde agosto de 2024 ha intentado salir de la colonia Reparto por Arriba. Sin embargo, las estrechas calles y los cables del tendido eléctrico atrasaron su sueño. No obstante, llegó al Pacífico hondureño, donde ahora flota con la esperanza de navegar.
