El presidente Porfirio Lobo ordenó a todos los funcionarios del poder Ejecutivo que se abstengan de expresar opiniones o declaraciones de manera pública sobre el proceso electoral.
El mandatario, que curiosamente en las últimas semanas se ha dado a la tarea de opinar sobre los comicios e incluso cuestionar a algunos candidatos presidenciales, prohibió a sus funcionarios brindar declaraciones a los medios sobre política.
La orden fue girada a través de un comunicado leído por el secretario de Comunicación, Miguel Ángel Bonilla, luego de que el director del Ihnfa, Felipe Morales, denunciara ante el Tribunal Supremo Electoral (TSE) al partido Libre por explotar de forma vulgar la figura de dos niñas en una concentración política.
“En respeto irrestricto a la vocación democrática y cívica de la presente administración del presidente Porfirio Lobo, todos los funcionarios o empleados públicos del poder Ejecutivo deberán abstenerse absolutamente de expresar opiniones o declaraciones de manera pública o por medios de comunicación sobre el proceso electoral”.
“Cualquier declaración u opinión pública con respecto a lo antes mencionado, que haya sido hecha con anterioridad al presente comunicado, queda completamente desautorizada y la misma no vincula en manera alguna al gobierno de la República”, dice el comunicado.
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