Deshacerse de los carnés de identificación ilegales que fueron emitidos en varios consulados en Estados Unidos recomendaron dirigentes catrachos a la comunidad hondureña residente en aquel país.
Eso debido a que se trata de un documento irregular que no ha sido autorizado por los gobiernos de Honduras y Estados Unidos, advirtió Jorge Rivera, representante catracho en Dallas, Texas.
El pasado lunes el presidente Juan Orlando Hernández anunció la separación de ocho cónsules hondureños por haber emitido estos documentos de manera irregular.
Dichos carnés eran tramitados por los hondureños pagando cantidades que van desde los 50 hasta los 100 dólares para realizar trámites en la unión americana, como la apertura de cuentas bancarias, a falta de un documento de pasaporte.
Rivera indicó que la comunidad hondureña fue engañada con estos documentos, los cuales -recomendó- deben ser recuperados por el gobierno hondureño a cambio de la devolución de los recursos que invirtió cada compatriota en dicho carné.
“El simple hecho de andar esos carnés es ilegal porque no están autorizados y eso es necesario hacérselo ver a la gente, que se deshagan de ellos o que el propio gobierno los recupere y le devuelva el dinero a la gente”, dijo el dirigente catracho.
Por esta irregularidades, el presidente Hernández determinó separar a los representantes de Honduras en New York, Miami, Los Ángeles, Atlanta, Nueva Orleans, Chicago, Dallas y Houston.
El gobernante anunció que en los próximos días procederá a designar a los nuevos cónsules, quienes serán supervisados por un auditor que se encargará de vigilar que haya un trato humano a los compatriotas en el exterior y que no sigan los cobros irregulares en las oficinas consulares.
Y es que los cónsules separados, según el gobierno, habían venido emitiendo los documentos pese a reiteradas prohibiciones por escrito establecidas desde la Secretaría de Relaciones Exteriores.
“Yo no tengo más que actuar y le pido a los que vayan a estar en los consulados y a los que están: tratemos dignamente a la gente que se va pagando una gran cantidad de dinero, arriesgando su vida, es gente luchadora, son héroes, lo menos que esperan es un buen trato y yo me voy a encargar de supervisar eso personalmente”, advirtió el viernes el presidente Hernández.
Los cónsules separados el pasado lunes fueron: Francisco Quezada, de Nueva York; Lizette Hawitt, de Miami; Gerardo Agüero, de Los Ángeles; Emelisa Callejas, de Atlanta; Elka Herrera, de Nueva Orleans; José Erasmo Montalván, de Chicago; Vicenzo Balleta, de Dallas, y Leonel Zúniga, de Houston.
