Pasamos frente al Portal de los Encuentros, Casa Cultural Comayagüense, lugar de donde provenía la música de marimba, que pensamos, era ejecutada por algún grupo de señores.
Pero ¡vaya sorpresa! Cuando entramos vimos que era un grupo de niños que ordenados en fila detrás de la marimba se esforzaban por ejecutar el instrumento a la vez que atendían las instrucciones de su maestro.
Los pequeños, entre los 11 y 12 años de edad, forman parte de la escuela de marimba organizada por el alcalde de Comayagua, Carlos Miranda Canales, quien al ver la realidad de que en esta ciudad solo hay tres grupos de marimba, decidió convocar a don Manuel de Jesús Guzmán, quien con todo gusto aceptó ser el maestro de los niños.
La escuelita dio inicio hace siete meses, las clases son gratuitas y el único requisito es que los alumnos tengan edades de entre 10 a 20 años, “que tengan buen oído, pero si saben silbar y cantar no necesitan más”, expresó el instructor.
Que no desaparezca
Quien ha escuchado la agradable melodía que emiten las teclas de madera de la marimba ya habrá notado que la mayoría de los ejecutantes de este instrumento son personas mayores.
La marimba es muy escuchada en las ferias culturales y forma parte del conjunto de instrumentos musicales de las danzas folclóricas, pero son pocos los músicos que ejecutan este instrumento, “yo soy director de un grupo musical que hay dentro de la municipalidad, y hay una carencia de músicos de marimba en todo el país, no solo es en Comayagua, si usted mira en los diferentes lugares la mayoría de los que conformamos grupos de marimba ya somos de edad avanzada”, agregó Guzmán, quien ejecuta este instrumento desde hace 45 años y es director de la Marimba Municipal de Comayagua.
Cuando iniciaron las clases de marimba los padres inscribieron a sus hijos y en otros casos, los niños pidieron ser inscritos, ya que muchos de ellos gustan de la música folclórica.
“A veces la matrícula es de más de quince alumnos, la mitad eran niños y la otra mitad niñas, pero a ellas no les forma mucho interés la música de marimba, entonces poco a poco han ido desertando, pero ahora sí los varones están rindiendo mucho y están asistiendo a sus clases”, dijo.
Don Manuel comparte que algunos de los niños tienen mucha destreza y aprenden rápido, a otros les cuesta más y tiene que enseñarles con paciencia.
Con sus pupilos ya ha realizado más de cinco presentaciones, y cuando están a tiempo completo practican mejor, pero a veces se les dificulta porque en la Casa Cultural se llevan a cabo diversas actividades de diferentes grupos de Comayagua y otros municipios, por lo que no pueden hacer mucho ruido y tienen que acortar las clases.
Según el experimentado instructor, ejecutar la marimba “es un tanto complicado, porque los músicos de uno y otro extremo tienen que conjuntarse para pegarle igual a las teclas, porque la diferencia es que unos sonidos son altos y otros bajos, pero debe haber armonía en el conjunto”.
Este instrumento debe ser ejecutado por siete músicos, porque se usan dos marimbas, la pequeña se llama “tenor” y la grande marimba. Los pequeños se ven emocionados por recibir estas clases, y comparten que esto los ayuda a alejarse de los vicios que son tan tentadores para los adolescentes, que las clases son entretenidas y de mucho provecho, porque están aprendiendo a ejecutar este instrumento que se ha quedado en el olvido.
Los padres de familia han visto con buenos ojos esta iniciativa del alcalde, que es de gran ayuda para que los niños no desperdicien el tiempo que tienen libre.
Al final de la práctica, don Manuel se sienta en un banquito, y sus alumnos en semicírculo a su alrededor, se ríen y platican mientras toman refresco y comen churros.