El presidente Porfirio Lobo Sosa
y sus antecesores, los también nacionalistas Rafael Leonardo Callejas y Ricardo Maduro, tienen ahora el reto de lograr lo que para muchos es algo difícil de alcanzar: la verdadera unidad del Partido Nacional.
Y es que pese a que la mayoría de precandidatos de esa institución política rechazan la mediación de estos líderes políticos, ellos se muestran decididos a impulsar el acercamiento entre los dos bandos que se han formado en el nacionalismo.
La división interna se ha hecho más evidente tras la realización este fin de semana de la Convención anual partidaria, la que estuvo marcada por la polémica y la confrontación. A este evento faltaron cuatro de los siete aspirantes presidenciales, con la justificación de que ellos no pueden celebrar mientras sus correligionarios están siendo perseguidos en las diferentes instituciones públicas.
Únicamente Juan Orlando Hernández, Loreley Fernández y Eva Fernández; llegaron a la cita.
No al acuerdo
Por su parte, Ricardo Álvarez, Miguel Pastor, Fernando Anduray y Víctor Barnica, han dicho no a la iniciativa de firmar un acuerdo de unidad
respaldado por los exmandatarios, ya que aseguran que ese documento viene con directrices “desde arriba”, es decir, desde Casa de Gobierno.
Tanto Lobo, como Callejas y Maduro, se hicieron presentes en la Convención del Partido Nacional instalada este fin de semana
en La Ceiba, en el caribe de Honduras. Allí, se mostraron optimistas en que en los próximos días los aspirantes lograrán ponerse de acuerdo para alcanzar la unidad.
“Algunas veces los amigos y amigas se preocupan por los tiritos grandes y pequeños entre unos
precandidatos y otros, ese no es el Partido Nacional,
lo que es válido es que cada uno de los que aspiran traten de ser una alternativa para el pueblo”,
manifestó “Pepe” Lobo durante una reunión con líderes de su Partido, previo a la Convención.
De su parte, el expresidente Ricardo Maduro (2002-2006), manifestó que el PN ha sido el precursor del desarrollo económico, político y social del país, tras resaltar la entrega del bono 10 Mil y otras iniciativas oficiales.
Además garantizó que con la labor que él desempeña a la par del expresidente Rafael Leonardo Callejas y la designada presidencial y ministra de la Presidencia, María Antonieta Guillén, obtendrán la unidad de ese instituto político de cara a los comicios primarios y generales.
Mientras tanto, el expresidente Callejas (1990-1994) expresó que “la convención no es sólo de trámite,
es un paso para fortalecer el partido. En las mesas electorales demostraremos la unidad, que el que surja sea el que obtenga el respaldo de las mayorías,
quitándose los egoísmos coyunturales, y el que
gane, que gane, y el que gane lo vamos apoyar”.
El reto ahora para Lobo, Callejas y Maduro, es lograr unir a un partido que parece más dividido que nunca; aunque algunos de los aspirantes que se oponen al cuestionado acuerdo de unidad, son de la opinión que a los exgobernantes “ya se les pasó su tiempo”.
