El arte lo lleva en las manos. Pero desde su alma le dictan los trazos que se traducen en bellos diseños que quedan estampados en papel.
Además de su don, lo único que ocupa para escaparse de este mundo y volar por el universo de la caligrafía, la escritura en letra gótica, redondilla y cursiva, es una pluma, papel y tinta.
Se trata de Rolando Gutiérrez, un hondureño de 69 años de edad que lleva dentro de sí una alma artística traducida en bellos diseños que estampa en tarjetas de invitación de bodas, cumpleaños y graduaciones.
Manejar a la perfección el arte de diseñar estas letras que tienen su raíz alemana, francesa e inglesa le ha servido para ganarse la autoría de la elaboración de las invitaciones en eventos tan particulares y de alta relevancia como la toma de posesión de un nuevo gobierno.
“He hecho varias invitaciones de toma de posesión como
la del presidente Ricardo Maduro, Manuel Zelaya y ahora la
del presidente Juan Orlando Hernández”, detalló.
Repertorio
Don Rolando cuenta con al menos 30 diferentes tipos de letras en cursiva y 12 en góticas. Mismas que para encontrar el diseño exacto utiliza como herramientas sencillas piezas, tales como plumillas, canutero, tinta papel calca, pergamino entre otros.
Todos conocen a don Rolando en el Barrio La Guadalupe, tanto por su arte manual como por ser autor de poemas personalizados que como parte de fiestas especiales, como el Día del Amor y la Amistad, Navidad, el Día de las Madres y el Día del Padre regala a sus vecinos como muestra de su aprecio.
“En cada fecha especial me gusta ser detallista
con mi comunidad, quien me recibe con los
brazos abiertos”, aseguró.
Regalo
“La práctica hace al maestro”, dice al tiempo que resalta que su arte no solo ha llegado a los hondureños, sino también a países como Francia y Colombia.
Don Rolando realizó sus estudios primarios en la escuela Federico Froebel y la secundaria la realizó en el instituto Salesiano San Miguel de esta capital en donde obtuvo su título de bachiller en Ciencias y Letras, luego cursó la carrera de Ingeniería Civil en las aulas de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).
Luego de desempeñarse en diferentes ámbitos de la carrera profesional, retomó el legado que un día su padre, don Luis Alonso, le heredó.
Se trata de un manuscrito que aún espera a ser publicado. El documento, llamado “Antología Mundial de la Poesía”, es un compendio de más de 700 poemas que ha formado parte de su alma artística, “de mi parte,
yo he escrito al menos 50 poemas que espero también algún día publicar”, dice con orgullo.
“A mí siempre me gustó hacer letras, en la escuela y el colegio nos enseñaron caligrafía, y ya saliendo del colegio siempre seguí haciendo las letras”, dijo don Rolando.
Trayectoria
Este destacado hombre de letras está casado con doña Ana María, una mujer de temple a quien ni las duras pruebas de la vida no le han impedido apoyar a su esposo en la consecución de sus proyectos artísticos, sobre todo durante los momentos dedicados a su arte que incluyen clases privadas
de caligrafía para enseñar la técnica de la escritura por el método de movimiento muscular del antebrazo, y que está contenido en los manuales respectivos, como ser el método Palmer de escritura comercial, del que sus alumnos salen satisfechos.
Ya que en cinco días logran aprender la base de lo que pudiera convertirse en una profesión para quien como Rolando no solamente aprecian el arte, sino que lo llevan en las llevas y lo demuestran en cada uno de sus escritos.