Su pasado resulta tan atractivo como su presente. Fundada allá por 1522 la ciudad de Choluteca, fue formada a unos cuatro kilómetros al norte del actual poblado.
La ubicación elegida en sus inicios no fue la mejor por las condiciones geográficas y años más tarde esta situación condicionó su traslado hacia la margen opuesta del río Choluteca.
Es este mismo sitio donde se construyó el convento e iglesia La Merced y el cabildo, espacio territorial que junto con otras edificaciones conforman hoy el centro histórico colonial.
Para la segunda mitad del siglo XVIII, la Villa de Jerez se había constituido en una de las más importantes de los españoles, según historiadores.
El centro antiguo lo conforman 39 manzanas, con un inventario de 439 viviendas, de estas unas 60 han sido sometidas a restauración.
En esta zona además se encuentran antiguas iglesias y casas de habitación que contribuyen con la imagen del poblado de siglos pasados.
La población residente en el casco histórico es de unas 2,500 personas, en promedio.
Entre los inmuebles más antiguos destaca la iglesia Catedral, la cual lleva de 200 años de permanecer en pie.
Otra de las iglesias antiguas es La Merced, construida con la llegada de los frailes de la Orden de Nuestra Señora de la Merced de la Redención de Cautivos. Este edificio expone el estilo barroco de mediados del siglo XVIII y es considerada como la primera iglesia que se construyó en la comunidad.
También sobresale el edificio municipal y el inmueble del Comedor Central, donde funcionó el primer casino de Choluteca, edificio que permanece abandonado.
Herencia
Las antiguas casonas con amplios corredores y techos de teja son sin dudas uno de los atractivos que embellecen el centro histórico de la sultana del sur.
Estos espacios que podrían convertirse en un mayor atractivo para turistas en su mayoría urgen de atención, con el fin de evitar que en unos años puedan sucumbir.
Las viviendas que en sus inicios fueron ocupadas por las familias más notables de la comunidad han sido heredadas de generación en generación.
Uno de los ejemplos es la vivienda donde reside Hernán Midence Guevara, junto a su familia. “Soy la quinta generación de la familia, vivienda que me fue heredada de mi bisabuelo paterno, Antonio Midence”, explicó el entrevistado.
El inmueble fue construido de adobe, con paredes de un grosor casi inimaginable, pues miden más de un metro, ya que en el centro llevan un espacio rellenado con piedra.
Midence, dijo que el encielado de la vivienda, armado con madera de cedro, data desde hace 100 años. En la actualidad Midence planea heredársela a sus hijos. Se estima que el 80 por ciento de las construcciones familiares han sido traspasadas como herencias familiares a lo largo de las décadas, como ha sucedido con la familia Midence. El arquitecto José Ramón Zuniga recordó que al llegar a la ciudad de Choluteca por primera vez se impresionó por el trazo que posee el centro de la comunidad.
Zuniga reconoció que en los últimos 25 años ha observado un deterioro en la parte colonial del casco histórico, debido a que se han ejecutado remodelaciones en antiguas edificaciones, sin que estén de acordes con la estructura original.
“Esto ha sucedido porque no se respetan las instrucciones del Instituto Hondureño de Antropología e Historia”, manifestó el entrevistado.
Para el historiador Miguel Mercado, “la ciudad antigua comprende el barrio el centro”.
La parte histórica esta integrada por cinco avenidas conformadas por 47 cuadras, que van desde la calle Vicente Williams llegar al río Choluteca.
Antiguos tesoros
Entre las reliquias que aún se conservan en la comunidad destacan los antiguos relojes de la catedral. El primer reloj data de 1890, el cual permanece en la parroquia de Santa Ana de Yusguare, aunque en mal estado.
De acuerdo con Mercado el segundo reloj, que se adquirió en Alemania pero sufrió fallas a causa de las tormentas eléctricas, en 1989 fue cambiado por uno electrónico. Este segundo reloj en la actualidad se ha planteado restaurarlo para colocarlo en la torre de la iglesia, debido a que el último que se adquirió lleva nueve años de permanecer en mal estado.
Calles con nombres célebres
Las cuatro calles que posee el centro histórico fueron bautizadas con nombres de personajes destacados de Choluteca siglos después del dominio español. Entre ellas la calle José Trinidad Reyes, la cual inicia desde la iglesia La Merced hasta llegar a la colonia Santa Marta, compuesta por nueve cuadras.
Otra es la calle Francisco Morazán, la que posee 10 cuadras, la cual inicia del lado derecho de La Merced hasta llegar al Hospital del Sur.
La calle José Trinidad Cabañas inicia en la calle Vicente Williams y finaliza a la orilla del río Choluteca, y la calle Colón, más conocida como calle Ancha, la que inicia en el bulevar Lidia Williams de Arias hasta llegar a la entrada del Cementerio General.
Turismo religioso
Los turistas además de apreciar los monumentos de la sultana del sur, también pueden visitar otros municipios como Pespire, comunidad que según historiadores se formó en 1611. Posee un hermoso templo católico y una antigua casa donde funciona la alcaldía.
El Corpus es otra de las comunidades que cuenta con una iglesia que data de 1855 y fue construida por los españoles, templo que en los últimos años fue restaurado. En Orocuina y Santa Ana de Yusguare también se puede apreciar de antiguas capillas.
